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Elecciones municipales y autonómicas

El PSOE facilitará que la derecha gobierne en Pamplona y seguirá negociando para hacerse con Navarra

  • La coalición de UPN, PP y Cs en Navarra Suma fue la opción más votada en las elecciones del 26M pero no logró mayoría
  • El secretario de Organización del PSOE no descarta gobernar Navarra con la abstención de EH Bildu pero sin negociar con ellos

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Los candidatos de Navarra Suma a la presidencia del Gobierno de Navarra y al Ayuntamiento de Pamplona Javier Esparza y Enrique Maya
Los candidatos de Navarra Suma a la presidencia del Gobierno de Navarra y al Ayuntamiento de Pamplona, Javier Esparza y Enrique Maya, celebran los resultados tras las elecciones del 26M.

El Partido Socialista de Navarra (PSN) dejará que el Ayuntamiento de Pamplona pase a manos de Navarra Suma, coalición formada por Partido Popular (PP), Ciudadanos (CS) y Unión del Pueblo Navarro (UPN), según ha podido saber TVE, y seguirá buscando apoyos para gobernar en la comunidad autónoma, donde la coalición de partidos de derecha ganó pero no consiguió la mayoría necesaria para gobernar en las pasadas elecciones del 26M.

El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, no descartó este lunes gobernar Navarra con la abstención de EH Bildu pero sin negociar nada con esta formación y afirmó que la investidura de Pedro Sánchez no depende de la formación de Gobierno en esa comunidad autónoma, mientras la líder del PSN, María Chivite, ha seguido negociando para buscar apoyos.

Ante las declaraciones de Ábalos, UPN respondía a través de un comunicado que "no hay abstención gratis" e insistía en que "Chivite solo podrá ser presidenta con el apoyo de Bildu". "Es la única forma, no hay otra, que no pretendan engañar a nadie", han expuesto desde la formación regionalista.

Si María Chivite lograra sumar a sus 11 escaños los de Geroa Bai (9), Podemos (2) e I-E (1) necesitaría de la abstención de EH Bildu para formar gobierno, puesto que no llegaría a la mayoría absoluta (26).

UPN acusa al PSOE de "ceder al chantaje del PNV"

En Pamplona, donde la coalición de derechas de Navarra Suma fue la formación más votada pero sin lograr la mayoría para gobernar, la candidata socialista, Maite Esporrín, aseguraba este lunes que no iba a respaldar a Navarra Suma ni a EH Bildu en el Ayuntamiento pero al mismo tiempo reconocía las dificultades para acceder a la alcaldía, tras haber logrado cinco escaños, e insistía en que no iban a negociar nada con EH Bildu.

El líder de UPN había ofrecido al PSOE sus dos votos para favorecer la investidura de Sánchez a cambio de que los socialistas facilitaran un gobierno de Navarra Suma en la comunidad autónoma, una posibilidad sobre la cual, la líder de de Geroa Bai y presidenta en funciones de Navarra, Uxue Barkos, había advertido de que suponía un "portazo" al PNV.

Precisamente, el PNV y el PSE cerraron este lunes un preacuerdo para "formar gobiernos estables" en las instituciones locales y forales del País Vasco, de manera que se apoyarán mutuamente en donde uno de los dos haya ganado las elecciones para obtener las alcaldías.

En opinión de UPN, según recoge el comunicado de esta formación, "el rechazo a los dos votos de UPN para la investidura de Sánchez es la muestra más evidente de que el PSOE quiere gobernar con nacionalistas e independentistas" y de que "el PSOE finalmente ha aceptado el chantaje del PNV".