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Bruselas prohíbe la fusión de Alstom y Siemens

  • Toma la decisión pese a las presiones de París y Berlín, que ahora quieren cambiar las reglas de competencia de la UE
  • Siemens y Alstom lamentan el veto del Ejecutivo comunitario y señalan que la operación no va a continuar

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14 horas - La CE veta la fusión de Siemens y Alstom

La Comisión Europea (CE) ha prohibido la fusión de las operaciones ferroviarias del grupo industrial alemán Siemens y su rival francés Alstom -pese a las presiones de los gobiernos de Berlín y París- por considerar que dañará la competencia en los mercados de trenes de alta velocidad y sistemas de señalización. La operación, por tanto, no seguirá adelante, tal y como ya han dicho las empresas. Francia y Alemania ya han adelantado que quieren cambiar reglas de competencia de la UE.

"Siemens y Alstom son dos puntas de lanza de la industria ferroviaria, sin medidas correctivas suficientes esta fusión hubiera supuesto una subida de precios en los sistemas de señalización que garantizan la seguridad de los pasajeros y de los próximos trenes de alta velocidad", ha argumentado la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, al anunciar la decisión.

La fusión, anunciada en 2017, fue recibida como el nacimiento de un líder industrial europeo -con 62.300 empleados y facturación anual de 15.300 millones de euros- capaz de hacerle frente a la competencia china. De hecho, tanto Francia como Alemania han presionado al Ejecutivo comunitario para que aprobara la fusión alegando que de otro modo las empresas europeas no podrán competir con el gigante ferroviario chino CRRC.

China no será un problema para Alstom y Siemens, según la Comisión Europea

Sin embargo la investigación comunitaria ha concluido que en el mercado de trenes de alta velocidad "es muy improbable" que la entrada de empresas chinas vaya a representar un problema de competencia para Alstom y Siemens en el futuro. En el caso del mercado de señalización, la CE ha confirmado que ahora mismo no hay proveedores chinos en el Espacio Económico Europeo (EEE) y que "pasará mucho tiempo" antes de que los haya.

El Ejecutivo comunitario concluyó que la fusión daría lugar a un "líder indiscutible" en determinados mercados de la señalización ferroviaria y a un "actor dominante" en el mercado de materiales rodados de los trenes de alta velocidad, con lo que se restringiría las opciones de los clientes, copando una gran parte del mercado tanto en Europa como en el resto del mundo -salvo en Corea del Sur, Japón y China, no abiertos a la competencia-.

"La Comisión ha prohibido la fusión porque las compañías no deseaban abordar nuestras serias preocupaciones", ha dicho Vestager. Según la agencia AFP, las autoridades de la competencia de Reino Unido, Países Bajos, Bélgica y España apoyaron a la comisaria europea por el temor al aumento de los costos de sus ferrocarriles nacionales.

Francia y Alemania plantean cambiar las reglas de la UE

El primer ministro francés, Édouard Philippe, ha calificado la decisión de "un golpe bajo a la industria europea" que se asienta en "malos fundamentos" y en una "concepción de la competencia tremendamente anticuada" que hay modificar de cara al futuro porque "es indispensable para la industria francesa, para la industria europea y para la construcción europea".

En esta línea, el ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, -para quien el dictamen beneficia en la práctica al gigante chino CRRC ya que "impide que Alstom y Siemens tengan el mismo peso" que su competidor- ha apostado por favorecer la constitución de campeones europeos, por lo que hará propuestas junto su homólogo alemán, Peter Altmaier, para cambiar las reglas de la competencia de la UE.

En el mismo sentido se ha pronunciado Altmaier: Alemania elaborará con Francia una iniciativa que contribuya a "un ajuste del derecho europeo en materia de competencia" acorde a los tiempos "para que en un futuro las fusiones sean posibles" y surjan grandes consorcios europeos capaces de competir en un contexto de competencia global con China y Estados Unidos.

Siemens y Alstom lamentan el veto de Bruselas

Siemens y Alstom han lamentado la decisión del Ejecutivo comunitario. Las empresas afirman estar convencidas de que la transacción hubiera creado valor añadido para el sector de la movilidad, la industria ferroviaria europea, los clientes, los viajeros y las personas que viajan diariamente en tren a su trabajo, sin perjudicar la competencia europea.

También hubiera permitido la creación de una empresa europea con capacidad de afrontar la creciente competencia de fuera de la UE. "Proteger los intereses de los clientes a nivel local no significa privarnos de estar en pie de igualdad con países líderes como China y Estados Unidos", ha asegurado el consejero delegado de Siemens, Joe Kaeser.

"Siemens va a estudiar todas las opciones para el futuro de su división Siemens Mobility y elegirá la mejor para sus clientes, empleados y accionistas", ha añadido la compañía alemana en el comunicado. Alstom, por su parte, ha dejado claro que la fusión no continuará y que ahora se centrará en seguir su camino de crecimiento "como líder mundial en el sector de la movilidad".