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Un atentado del Estado Islámico deja una veintena de muertos en Afganistán en pleno alto el fuego entre talibanes y Gobierno

  • El Estado Islámico no había secundado ningún tipo de cese de la violencia
  • El presidente del país ha prolongado el alto el fuego, que era de tres días inicialmente

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Un miembro de los talibanes ondea una bandera en Kabul
Un miembro de los talibanes ondea una bandera en Kabul.

Al menos 20 personas han muerto y otras 16 han resultado heridas en un atentado suicida contra un grupo de talibanes y civiles reunidos para celebrar el alto el fuego de ese grupo insurgente y el Gobierno que arrancó la noche del jueves al viernes, con motivo del final del Ramadán. El grupo yihadista Estado Islámico (EI) ha asumido la autoría.

"Sobre las 17.30 (15:00 hora peninsular española), en la localidad de Ghazi Amanulah Khan del distrito de Rodat, un insurgente suicida que iba a pie hizo detonar sus explosivos entre un grupo de talibanes y civiles que se habían reunido para celebrar el cese el fuego", ha asegurado a Efe el portavoz del gobernador provincial, Attaullah Khogyanai.

El atentado se produjo a unos 15 kilómetros al este de Jalalabad en una zona controlada por el Gobierno, en Nangarhar, considerado el bastión del EI desde su irrupción en el país en 2015, organización terrorista que no ha suscrito cese alguno de la violencia.

En un comunicado difundido en la red de mensajería Telegram por la agencia Amaq, afín al autodenominado Estado islámico, y cuya autenticidad no ha sido verificada, el grupo ha asegurado que el atentado es una "operación de martirio que ha golpeado una agrupación de los miembros de las fuerzas de seguridad afganas y del movimiento talibán en Jalalabad, en Nangarhar".

Primer atentado durante el alto el fuego, que el Gobierno prolonga

Este es el primer atentado que ha tenido lugar desde que en la medianoche del jueves al viernes entrara en vigor el alto el fuego de los talibanes con motivo de Aíd al Fitr y que coincide desde este viernes con una tregua similar anunciada unilateralmente la semana pasada por el presidente afgano, Ashraf Gani, un cese el fuego sin precedentes en 17 años de conflicto.

Precisamente, Gani ha anunciado una prolongación del alto el fuego con los talibanes anunciado la semana pasada con motivo del final del Ramadán. "Para respetar los deseos del público y apoyar sus demandas de paz, ordeno a las fuerzas de seguridad y defensa que prolonguen el alto el fuego desde el cuarto día del Aíd (al Fitr, final del Ramadán)", ha dicho Gani en un discurso a la nación, pero donde no ha especificado por cuánto tiempo estará en vigor la medida.

"También pedimos a los talibanes que extiendan su alto el fuego. Durante el cese el fuego, proveeremos de asistencia médica a los talibanes heridos y ayuda humanitaria de ser necesario, a los presos talibanes se les permitirá contactar y ver a sus familias", ha agregado el dirigente.

Gani ha renovado su llamamiento a unas negociaciones de paz y ha asegurado que el Ejecutivo está preparado para debatir todas las demandas de los insurgentes en la mesa de diálogo. La paz, ha dicho, es una "necesidad urgente" puesto que las últimas 24 horas ha habido un "consenso" sobre ella entre el Gobierno y los talibanes, lo que prueba que "todos quieren paz".