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El Congreso rechaza con voto secreto la propuesta de retirada de la reforma del aborto

  • Ruiz-Gallardón: "La mayoría" ha rechazado "no debatir la ley del aborto"
  • Izquierda Plural, UPyD y PNV han apoyado la propuesta del PSOE
  • Valenciano al PP: "No voten como diputadas lo que no votarían como mujeres"
  • Villalobos rechaza la oportunidad brindada por el PSOE de "ser traidores"
  • Gallardón, en el Senado, sobre el aborto: "Ningún derecho es absoluto"

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El Congreso rechaza con voto secreto la propuesta del PSOE que pedía la retirada de la reforma del aborto

El Pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado con voto secreto, en conciencia y depositado en una urna, la proposición no de ley presentada por el grupo socialista para pedir la retirada del anteproyecto presentado por el Gobierno para la reforma de la ley del aborto. El PP, con un voto prácticamente en bloque, ha superado la votación secreta que el PSOE ha planteado, pero sus votos no suman los diputados del grupo popular presentes en el hemiciclo, lo que podría dar a entender que ha sufrido alguna abstención.

La propuesta no ha salido adelante por 183 votos en contra, mientras que 151 diputados la han apoyado y otros seis se han abstenido. De los 186 diputados que el PP tiene en la Cámara Baja, 179 estaban presentes en la votación -incluídos los ministros- y pese a las diferencias expresadas por algunos miembros del PP sobre el contenido de la reforma, se desconoce, de momento, si alguno de sus diputados finalmente ha apoyado la propuesta con su voto.

De antemano se sabía que el diputado de Foro Asturias se iba a abstener, mientras que desde Unió aseguran que sus seis diputados habrían votado en contra, al igual que el representante de UPN, lo que colocaría los votos del PP en 176 o 177. Es decir, pese al voto secreto que había pedido el PSOE en su proposición, el  resultado global ha mostrado que apenas ha habido deserciones tanto en  los votos a favor como en contra.

Al término de la votación, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha mostrado su "respeto por las minorías" y ha valorado el resultado de la votación como la "expresión de la voluntad popular", reflejo de que la "mayoría de representantes de los ciudadanos ha rechazado que no se debata la ley del aborto".

"Entiendo el resultado como expresión de la voluntad popular, creo que la soberanía nacional, como todo el mundo sabe, reside en el pueblo español y está representado en esta Cámara", ha destacado el ministro.

Los diputados han votado la proposición no de ley en urna con papeleta,   una vez que los socialistas formalizaron la petición en ese sentido   dirigida al presidente del Congreso, Jesús Posada, el pasado 6 de   febrero.

Ahora, el actual anteproyecto de ley de Protección del Concebido y de la Mujer embarazada continuará en período de consultas para que, tal y como han confirmado desde el PP en alguna ocasión, la normativa llegue al Congreso de los Diputados e inicie su tramitación parlamentaria al comienzo del verano, pasadas las elecciones europeas del 25 de mayo. 

"No votar como diputadas lo que no votarían como mujeres"

Al inicio del debate de esta proposición, la portavoz del PSOE Elena Valenciano se ha dirigido a las diputadas del PP para pedirles que “no voten como diputadas lo que no votarían como mujeres”.  Así ha terminado su discurso para defender la propuesta del PSOE en el  que ha advertido a los populares que están “a tiempo de detener este  retroceso caprichoso e injusto” en los derechos.

Valenciano ha acusado al PP de convertir a las mujeres en “moneda de cambio” por “un problema” con el “ala dura” del partido. Así, ha solicitado al PP que renuncie a "convertir el anteproyecto de ley del aborto en un proyecto de ley" y que que no siga en la tramitación que supone un "enorme retroceso para la sociedad española".

Por su parte, la diputada del PP Marta Torrado ha acusado al PSOE de “pedir la retirada de todas las leyes que anuncia el Gobierno” y ha defendido una reforma que “por primera vez no contempla la posibilidad de que una mujer vaya a la cárcel”.

También ha criticado al grupo socialista por “creerse con una superioridad moral en determinados temas” y no querer “profundizar ni dialogar” sobre el proyecto, sino limitarse a pedir su retirada.

Izquierda Plural, UPyD y PNV apoyan la propuesta

Los portavoces de Izquierda Plural, UPyD PNV avanzaron en el debate previo que apoyarían la propuesta, tras la defensa presentada por Valenciano.

La portavoz de Igualdad de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA),  Ascensión De las Heras, se sumó a la propuesta del PSOE ante el  rechazo de la sociedad española y de expertos ante este anteproyecto  de ley que, a su juicio, "huele a Derecho Canónico y a incienso".  "Hoy lo que está en juego aquí es la libertad de las mujeres del  país, a las que se quiere recortar sus derechos fundamentales,  decidir sobre su cuerpo y su propia sexualidad", ha destacado.

El PNV apoya la propuesta del PSOE, según ha explicado su portavoz, porque “no deja de haber abortos por el mero hecho de que el Gobierno no quiera que los haya” y la reforma se basa en “una falta de consenso”.

Por su parte, el diputado de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, ha criticado la reforma del aborto que sitúa a las mujeres “en una situación de inferioridad” algo que es “inaceptable”. Lo ha dicho tras anunciar que apoyará la propuesta del PSOE aunque con matices porque la reforma del aborto, “no afecta solo a las mujeres”, ha añadido.

CiU no se posiciona como grupo

Mientras, Convergència i Unió (CiU) ha avanzado que dejaba libertad a sus  diputados para que cada uno votase en conciencia lo que quisiera y evitó posicionarse como grupo.

Sí lo hizo en cambio Unió Democrática de Catalunya (UDC), cuyos seis diputados habrían votado en contra de la propuesta si se ha cumplido lo anunciado por su portavoz, ya que este grupo considera que todavía queda tramitación parlamentaria para que su grupo  presente "iniciativas" y porque "todavía no han tomado una decisión"  sobre una reforma que "aún no existe", aunque no la comparten.

El debate y votación de esta iniciativa forma parte de la "ofensiva" parlamentaria que los socialistas han planteado para esta semana contra la modificación de la ley del aborto, con tres preguntas al Gobierno en el Pleno del Senado hoy y otra en el Pleno del Congreso, el miércoles.

Gallardón defiende el anteproyecto en el Senado

Antes de que la propuesta del PSOE se vote en el Congreso, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha dicho en el pleno del Senado que “ningún derecho en un Estado de convivencia es absoluto”, en relación al anteproyecto de la reforma de la ley del aborto.

Gallardón, sobre el aborto: "Ningún derecho es absoluto"

Gallardón, en respuesta a una pregunta del senador de Entesa, Joan Saura, ha defendido que la reforma que garantiza el derecho de las mujeres a estar "informadas" y "acompañadas" y que cuando su salud psicológica “entra en conflicto” con el derecho del no nacido, “el tribunal tiene que resolver en ese conflicto”, ha señalado. Además, el ministro le ha cuestionado por qué le pide solicitar la retirada de la ley sin debatirla antes.

El senador de la Entesa ha calificado de "cínico" el título del Anteproyecto de Ley de Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Mujer Embarazada porque, a su juicio, "retira todo los derechos de las mujeres" y, además, "otros" van a decidir sobre sus cuerpos y su maternidad.

"No es una ley de derechos sino de sufrimiento", ha enfatizado Saura, quien ha pedido a Gallardón que "devuelva" los derechos a las mujeres y haga una ley que pueda ser aceptada por la mayoría de la población.

Villalobos rechaza la oportunidad para ser "traidores"

También, de forma previa a la votación, se pronunció la vicepresidenta primera del Congreso, Celia Villalobos, asegurando que rechaza la "oportunidad" que, a su juicio, ha brindado el PSOE a los diputados del PP para ser "traidores" en la votación secreta de este martes en el pleno de la Cámara baja.

En los pasillos del Congreso, Celia Villalobos -que en el pasado ha mantenido opiniones diferentes a la del PP en el aborto- dejó claro que a ella le gusta "dar la cara" y que no necesita del voto secreto para fijar su propia posición.

La vicepresidenta del Congreso, que el pasado 8 de enero aprovechó el Comité Ejecutivo Nacional del PP para pedir a Rajoy libertad de voto sobre la reforma, no preveía así sorpresas en la votación secreta sobre la proposición no de ley del PSOE.

Igualmente, por la mañana, el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, daba por garantizado que su grupo parlamentario no se iba a "romper" ni se iba a "quebrar" en la votación, a pesar del intento del PSOE de "dividir" al PP sobre este asunto.