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Programas de ordenador que simulan la inteligencia de los seres humanos

  • Un software especializado es capaz de puntuar 150 en los tests de inteligencia
  • Emplea una estrategia para reconocer patrones como los humanos
  • Sus dominios son limitados y está lejos de ser aplicable a cuestiones prácticas

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Los científicos han creado un programa que supera al 99,95% de las personas
Los científicos han creado un programa que supera al 99,95% de las personas

En el campo de la inteligencia artificial los expertos siguen teniendo mucho que decir y no solo porque ya haya ordenadores que sean capaces de 'arrasar' en los concursos de preguntas y respuestas.

Recientemente un equipo de investigadores suecos ha anunciado que habían creado un programa capaz de puntuar 150 en un test estándar inteligencia. Sin embargo, tal y como explican su descubrimiento, se trata de un sistema un tanto limitado.

¿Qué terrenos de la mente humana y cibernética están explorando exactamente? Los tests de inteligencia han evolucionado mucho desde hace un siglo, cuando el más 'listo de la clase' era básicamente el que mejor memoria tenía.

En la actualidad hasta el término 'test de C.I.' (cociente o coeficiente intelectual) está un tanto desfasado, pero existe un consenso científico acerca de la validez de esas pruebas y de las escalas que sirven para medir la inteligencia de los seres humanos.

El software sería el más inteligente de un grupo de 1.125 individuos, un auténtico super-superdotado

En la actualidad el C.I. se refiere a la puntuación relativa que obtiene una persona respecto a otras del mismo rango de edad: 100 es el valor promedio y las puntuaciones se distribuyen por debajo y por encima de la media, según unos cálculos y tablas que varían según la versión de la prueba que se realice.

Por encima de 130 o, lo que es lo mismo, por encima del 98% de la población, están los llamados superdotados. Los investigadores suecos han creado un software capaz de puntuar 150.

Eso quiere decir que estaría por encima del 99,95% de las personas o, dicho de otro modo, sería el más inteligente de un grupo de 1.125 individuos. Un auténtico 'super-superdotado'.

Tiene truco

Tanta inteligencia tiene un poco de truco: los problemas que es capaz de resolver correctamente son un tanto limitados. En este tipo de pruebas se utiliza el tradicional concepto de secuencias en las que hay que adivinar los patrones.

Pueden ser secuencias de tipo gráfico, con formas y colores, o numéricas: si aparecen, por ejemplo, un triángulo, un cuadrado y un pentágono, el siguiente elemento de la serie sería un hexágono.

Si la secuencia fuera 2, 4, 6… la respuesta correcta sería 8. Sin embargo, explican los investigadores, en algunos casos lo que parece fácil no siempre lo es tanto.

Una secuencia como 1, 2… puede ir seguida de 3, pero también podría haber quien respondiera -en cierto modo, correctamente- que también puede seguir …1, 2, 1, 2, oscilando continuamente.

O quizá que es 1, 2, 4, 8 en la que cada número es el doble que el anterior. Esa es parte de la sutil diferencia entre la inteligencia de los humanos y de los ordenadores, el terreno que están explorando los investigadores de la Universidad de Gotenburgo: no cuáles son las respuestas simplemente válidas o más exactas, sino las 'más humanas'.

Tests simplificados

Para ello simplificaron los tests para concentrarse en el trabajo con las secuencias de patrones numéricos, intentando evitar trampas como alimentar al software con todas las secuencias conocidas o predefinidas de los tests.

El programa emplea un modelo matemático de la forma en que razonan las personas

Lo que hace el software es utilizar un modelo matemático de la forma en que razonamos las personas, sin tener una idea preconcebida de las soluciones.

Lo llaman "una combinación de matemáticas y psicología", que le da un toque especial y le hace capaz de puntuar como los mejores en los tests de inteligencia diseñados para personas.

Sin embargo, este método está todavía muy lejos de ser una solución universal: "cuando se alimentan estos modelos con datos como los de los mercados financieros, o experimentos científicos, a ver si predicen algo… el resultado no es gran cosa".

Debe ser porque para analizar datos fríos de forma científica hay que contemplarlos como una máquina, mientras que para las pruebas de inteligencia genuina es mucho mejor 'relajarse' e imitar la psicología de un ser humano.