Enlaces accesibilidad

Bruselas propone la emisión conjunta de "bonos de estabilidad" para aliviar la deuda

  • Durao Barroso y Olli Rehn presentan la propuesta de la Comisión
  • Los estados tendrían que presentar sus anteproyectos de presupuestos ante la Comisión
  • Un reglamento establecería la vigilancia de los países sometidos a rescate

Por
Bruselas propone "bonos de estabilidad" a cambio de la supervisión de los presupuestos nacionales

La Comisión Europea ha propuesto oficialmente la emisión de "obligaciones conjuntas", que denomina "bonos de estabilidad", que ofrezcan ciertas garantías y que reemplacen parcialmente a los bonos nacionales. Dichos bonos serían "beneficiosos" en la actual situación y tendría que venir acompañados de mayor disciplina presupuestaria y fiscal de los estados miembros.

El presidente de la Comisión, Jose Manuel Durao Barroso, y el Comisario de Economía, Olli Rehn, han presentado la propuesta, recogida en un "Libro verde", sobre la viabilidad de las tres opciones de bonos ya adelantadas.

"Las obligaciones no van a resolver los problemas inmediatos ni reemplazan las reformas necesarias en países sometidos a presión - ha reconocido Barroso - pero mostrará que somos serios, que sabemos que necesitamos reforzar la gobernanza con la voluntad de vivir juntos en la zona euro, y son un buen ejemplo de disciplina".

Oposición de Alemania

"Nuestra intención no es ir en contra de nadie, y desde luego no de la mayor economía de la zona euro (Alemania). Tenemos el derecho y el deber de presentar un análisis de las cuestiones importantes para el debate", ha dicho Barroso, quien ha pedido que el debate sobre los bonos no sea "dogmático".

La canciller alemana, Ángela Merkel, ha reiterado este mismo miércoles que se opone a la emisión de este tipo de deuda conjunta y a cualquier modificación en la actuación del BCE.

El presidente de la Comisión cree que "la idea de tener unos bonos de estabilidad se está imponiendo, y si vemos los comentarios que provienen de Alemania, se centran más bien en el momento".

Por su parte, Olli Rehn ha advertido que "no hay bala de plata para salir de la crisis, hay que trabajar con todos...han de aplicarse una serie de medidas para proporcionar una situación que valga para reforzar la gobernanza económica".

Vigilancia de países "en riesgo de inestabilidad"

Junto al "Libro Verde", la Comisión propone la adopción de dos reglamentos para reforzar la disciplina presupuestaria de los Estados miembros y limitar el riesgo que la inestabilidad de algunos países puede suponer para la zona euro.

El primero etablecería la obligación de que los estados enviaran sus anteproyectos de presupuestos a la Comisión antes del 15 de octubre de cada año. En caso de que dichos presupuestos recogieran "divergencias" con los pactos de estabilidad, la Comisión podría enviar "recomendaciones" a dichos estados.

Como complemento, la Comisión pide que los anteproyectos de presupuestos se basen en "predicciones independientes".

Según Barroso, además de la especulación en los mercados una de las causas de la crisis es que "muchos pensaron que los buenos tiempos iban a durar siempre y no han mantenido la disciplina necesaria".

El segundo reglamento, según han declarado Barroso y Rehn, especifica los requisitos para el seguimiento de los estados miembros que "reciben asistencia o que sufre el riesgo de perder estabilidad financiera y consecuentemente poner toda estabilidad zona euro en peligro".

"Proponemos que se refuerce la vigilancia y que la misma continúe hasta que el 75% de los préstamos pueda devolverse", ha explicado Rehn. "Una vez se hayan reducido stocks de deuda, el programa no se va a aplicar", ha añadido.

Este reglamento sugiere que la Comisión tenga derecho de proponer al Consejo que se recomiende a un estado miembro pedir asistencia financiera cuando sea necesario.

"Esto se basa en experiencias recientes que ha mostrado que un estado miembro evita siempre hasta el último minuto ser rescatado, y esto ha empeorado las situaciones y ha incrementado los costes para otros estados miembros y la necesidad financiera del rescate", ha dicho Rehn.