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El déficit del Estado se reduce casi a la mitad hasta noviembre y supone el 3,68% del PIB

  • El déficit es de 38.725 millones de euros, un 45,8% menos
  • Los ingresos no financieros crecen el 25,4% y los gastos bajan el 0,8%

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El déficit de España se reduce en un 46% hasta noviembre

El déficit del Estado hasta noviembre fue de 38.765 millones de euros, el 3,68% del PIB, lo que supone una reducción del 45,8% con respecto al mismo periodo de 2009, gracias sobre todo al aumento de los ingresos por IVA y a las medidas de recorte del gasto adoptadas por el Gobierno en este tiempo.

Según el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, este déficit fue el resultado de unos ingresos no financieros del Estado por valor de 119.210 millones, el 25,4% más, frente a unos gastos que se redujeron el 0,8%, hasta los 162.257 millones.

De esa cifra de ingresos del Estado se ha descontado la participación de los entes territoriales en la recaudación por IRPF, IVA e impuestos especiales.

Se va a cumplir con holgura con el déficit

Ocaña afirma que estas cifras sugieren que se va a cumplir  "con holgura" con los objetivos de déficit del Estado para este año -del  6,7% del PIB- y se podrá así incluso "compensar" si hay desviaciones en  la ejecución de otras administraciones.

Ayer las comunidades autónomas presentaron de forma homogénea sus cifras de déficit y la cifra del 1,24% hasta septiembre invita al optimismo ya que está dentro del objetivo previsto para final de año, el 2,4%, aunque los peores datos podrían salir de la Seguridad Social o de los  ayuntamientos.

El secretario de Estado subraya que este año era "el más difícil" para  cumplir con el déficit y finalmente se va a conseguir, lo  que hace que el Gobierno se "reafirme" en la idea de que logrará reducir  el saldo negativo del conjunto de las administraciones al 3% del PIB en  2013 como exige la Comisión Europea.

Añade que, en cualquier caso, hay que seguir trabajando en la  dirección tomada, no sólo desde la austeridad sino también acometiendo  las reformas estructurales prometidas para "ganar confianza", y  conseguir que "los mercados se normalicen" y la economía consolide su  crecimiento.

Mejores cifras

Las cifras parecen dar la razón a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, que ha repetido en numerosas ocasiones que el control del déficit va por buen camino y que España no tendrá problemas de financiación en 2011.

En términos de caja -que computa los ingresos y pagos cuando se efectúan, y no cuando se comprometen- el Estado registró hasta noviembre un déficit de 43.047 millones, frente al saldo negativo de 68.509 millones que se registró en el mismo período de 2009.

Pese a los buenos datos, la agencia Moody's no rebaja la presión y tras poner el lunes en revisión la deuda de 30 entidades financieras españolas, ahora baja la nota de Murcia y Castilla-La Mancha, las dos regiones con más déficit.

Más ingresos por impuestos

La reducción del déficit se está logrando sobre todo por la mejora de los ingresos impositivos, que representan el 92% del total y que han aumentado el 11,1% en este periodo por las medidas fiscales tomadas por el Gobierno.

El efecto neto de estas medidas ha sido tal que ha supuesto ingresos adicionales por 5.650 millones de euros, según los datos facilitados por Ocaña.

Esto ha sido posible con la subida del IVA y de los impuestos especiales, la desaparición de la deducción de 400 euros en el IRPF y el aumento de las retenciones fiscales a las rentas de capital, pero también por las menores devoluciones por IVA en comparación con el mismo periodo del año anterior.

Sin embargo, otras medidas han operado en sentido contrario, como las menores retenciones del trabajo por la rebaja de los salarios públicos o el efecto que ha tenido la reducción del tipo impositivo en sociedades e IRPF por mantenimiento o creación de empleo.

El último mes del año es en el que se contabilizan buena parte de los gastos del Estado, y sobre todo en un ejercicio como éste en el que los departamentos más inversores han tenido que reprogramar sus actuaciones y la ejecución de sus cuentas está siendo más lenta, de ahí que el déficit en el último mes se acelerará, según Ocaña.