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Los tres autores del robo de la placa de entrada de Auschwitz irán a la cárcel

  • Una llamada ciudadana permitió la detención de los culpables
  • Los tres implicados han confesado el robo y aceptado la sentecia

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Pawel S. (izquierda) y Lukasz M. (derecha), acusados de robar el letrero "Arbeit macht frei"
Pawel S. (izquierda) y Lukasz M. (derecha), acusados de robar el letrero "Arbeit macht frei"

Un tribunal de Cracovia ha condenado a los tres acusados de robar la placa que se encontraba a la entrada del campo de concentración de Auschwitz a penas de entre dieciocho meses y dos años y medio de cárcel.

No ha sido necesario que se lleve a cabo un proceso judicial ya que los tres autores han confesado el delito y, además, han aceptado la sentencia. Además, han aprovechado para pedir disculpas por lo ocurrido aquella noche del 17 a 18 de diciembre en la que ocurrieron los hechos.

Fue entonces cuando desmontaron la placa, que tenía inscrito "Arbeit Macht" (el trabajo libera), lo dividieron e partes y lo llevaron hasta una casa de campo ubicada en el centro del país, a 600 km de donde estaba la placa hasta entonces.

Además hay dos implicados más en el caso. Por un lado, la persona que reclutó a los ladrones y, por otro, el sueco que iba a vender la placa en su país. Ambos permanecen bajo custodia policial esperando el proceso.

El "cabecilla" Anders Hoegstrom, acusado de haber encargado el robo, también está detenido y será próximamente extraditado a Polonia para el juicio.

La población polaca, implicada en la búsqueda de culpables

Este robo implicó a la población ya que se sintieron avergonzados. Por ello, se volcaron en colaborar con la policía para localizar a los delincuentes y recuperar el cartel.

Gracias a eso, una llamada ciudadana permitió a los agentes hallar en pocos días la placa y detener a los cinco responsables del delito.

El letrero forjado en acero preside la entrada al complejo de campos de concentración y exterminio de Auschwitz, donde durante la II Guerra Mundial murieron más de un millón de prisioneros, sobre todo judíos.

La placa original fue elaborada por uno de los prisioneros del campo por orden de las autoridades nazis y aún está restaurándose. Cuando se acabe esa labor, sustituirá a su réplica.