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Betancourt no descarta volver a luchar por la presidencia de Colombia

  • La líder colombiana, que vuela a París, tomará la decisión en función de sus hijos
  • Asegura que "quiere ayudar a quienes viven en su misma situación"
  • Su intención es vivir un tiempo entre Colombia y su país de adopción, Fracia
  • Planea lanzar una cruzada internacional por la libertad de la premio Nobel San Suu Kyi
  • Su nombre suena con fuerza de cara al Premio Principe de Asturias de la Concordia

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El futuro inmediato de Ingrid Betancourt

Sólo dos días después de que recuperará la libertad, Ingrid Betancourt comienza a hablar de su futuro. Un futuro lejos de la selva y en el que no descarta asumir responsabilidades políticas. La que fuera candidata a la presidencia colombiana está dispuesta a seguir luchando por "los compañeros que se han quedado en la selva".

Betancourt no renuncia a la lucha activa. Lejos de arrojar la toalla, la franco-colombiana sólo pone una condición a su implicación en la lucha: que ésta no afecta a las necesidades de sus hijos.

"No sé qué voy a hacer en el futuro. La libertad me llega de repente y aún estoy bajo la anestesia del shock vivido. Quisiera poder vivir entre Francia y Colombia, pero como eso es imposible de momento me voy a Francia y después tendré que tomar una decisión en función de mis hijos, de sus necesidades y de sus vidas. Necesitan a su madre", aseguró Betancourt.

La más afamada rehen de las FARC hizo este anuncio pocos minutos antes de volar hacia París, donde este viernes por la tarde será recibida por el presidente galo, Nicolás Sarkozy, fuerte impulsor desde que llegó al Elíseo hace 14 meses de una camapaña por su liberación.

Betancourt, que fue diputada en el Congreso colombiano durante 8 años, quiere implicarse en el futuro de su país natal, aunque ha reconocido que aún no sabe de qué forma. Su intención inicial es pasar un tiempo entre Francia -el país al que emigró, en el que encontró a su marido y del que son naturales son dos hijos- y Colombia -lugar que la vio nacer y del que nunca se ha llegado a marchar realmente-.

"Voy a tratar de crear un movimiento, una cadena, para tocar los corazones. Quiero encontrar los medios para tratar de cambiar las vidas de los que nos necesitan, más adelante después de pensarlo decidiré si estaré en la vida política de mi país, si voy a participar en las elecciones, pero en este momento no puedo responder", ha afirmado Betancourt, quien fuera rival político del actual presidente colombiano Álvaro Uribe, y con el que vivió un emotivo reencuentro tras su liberación.

'Aspiro a servir a mi país como presidente'

La figura de Ingrid es fuente de gran cantidad de informaciones en todo el mundo. Medios internacionales como la BBC recoge declaraciones de la ex candidata sobre su intenciones de futuro: "Yo aspiro a continuar sirviendo a mi país como presidente".

Los medios de su país se preguntan de forma directa sobre sus próximos proyectos, y es que a nadie se le escapa que lo que realmente interesa al gran público a cerca del caso Betancourt -a parte de cómo fueron sus años de cautiverio- es si su nombre volverá a aparecer en una papeleta electoral.

Mientras estaba en la selva, los medios colombianos seguían incluyéndola en las encuestas de popularidad de que valoran políticos colombianos. El pasado marzo, una encuesta reveló que el 71% de los entrevistados afirmaron tener una imagen positiva de la entonces rehen.

El diario El Tiempo ve mucha carga política en el futuro de Betancourt, quien ya ha anunciado su intención de iniciar una cruzada mundial por la liberación de una mujer que vive un infierno similar al suyo, la premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, bajo arresto domiciliario desde hace varios años en Birmania.

Además, el nombre de Ingrid Betancourt suena con fuerza para las nominaciones al Premio Príncipe de Asturias de la Concordia de este año. Parece pues que la franco colombiana tiene planes de futuro para los próximos meses que van más allá de su vida privada.