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Cerca de 200 empleados del Hospital de Móstoles abroncan a Juan José Güemes

  • Con gritos de "Fuera, fuera" ha sido recibido el consejero de Sanidad madrileño
  • Güemes visitaba el centro hospitalario, en su 25 aniversario

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Cerca de 200 trabajadores del Hospital de Móstoles han recibido entre pitos y gritos de 'Fuera, fuera' al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Juan José Güemes, a su llegada al centro sanitario para participar en los actos de su 25 Aniversario.

Los trabajadores portaron pancartas en defensa de la Sanidad pública y lemas como 'No a la privatización a la Sanidad'. Algunos de ellos, que se encontraban en el interior del salón de actos, salieron al hall del Hospital donde continuaron con sus protestas durante todo el desarrollo del acto.

Uno de los trabajadores del centro, el doctor Carlos Barra, aseguró que personal encargado de la seguridad del evento le impidió "a empujones" la entrada al Salón de Actos y anunció que iniciará "las acciones judiciales oportunas".

Por su parte, el responsable madrileño de Sanidad continuó con su acto con total normalidad y al inicio de su intervención agradeció "la hospitalidad" con que fue recibido en el municipio esta mañana.

El pasado 23 de mayo, Güemes fue objeto de otra dura bronca por parte de trabajadores del Hospital Ramón y Cajal. En aquella ocasión Esperanza Aguirre acompañaba al consejero de Sanidad madrileño y los dos fueron abroncados por unos cincuenta empleados del centro sanitario que reclamaban con pancartas y gritos el desarrollo de la sanidad pública.

Además, hace unas semanas en el municipio de Leganés personal del Hopistal Severo Ochoa se encerró  protestando por el desmantelamiento del centro. Enviaron un comunicado al propio Güemes en el que exigían a la Consejería de Sanidad la creación de una unidad de cuidados paliativos en el Severo Ochoa, el restablecimiento de los servicios de salud mental que venía prestando el centro, la restitución de los profesionales "apartados" por la Comunidad de Madrid y el acatamiento de la sentencia judicial que archiva las acusaciones de presuntos homicidios.