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Barcelona ya ha consumido los 19.000 metros cúbicos de agua del primer barco

  • El agua ya ha sido almacenada por la red de Aguas de Barcelona
  • Antes ha pasado unos estrictos controles de calidad
  • En total serán 189 viajes en barco y un coste de 53 millones de euros
  • El alcalde de Tarragona no consentirá el llenado de piscinas con el agua de los acuíferos

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El área metropolitana de Barcelona, y sus 5,5 millones de habitantes, ya han consumido todo el agua que ha transportado el primer barco que ha llegado a la ciudad condal procedente de Tarragona.

El buque de bandera panameña Sichem Defender tiene una capacidad de 19 millones de litros de agua. Esta operación de llevar el agua en barco se ha diseñado para paliar los efectos de la sequía en Barcelona.

Agua bajo control

Para que el agua llegue a los hogares barceloneses es necesario un complicado proceso. El agua es transportada por 13 kilómetros de tuberías hasta los depósitos de Aguas de Barcelona en Cornellá de Llobregat, desde donde son distribuidos a toda la red de agua potable. El primer cargamento ha tardado ocho horas.

El agua pasa unos estrictos controles sanitarios, para que no suceda lo mismo que cuando se usaron barcos para llevar agua a Mallorca. En aquella ocasión hubo que verter el agua en el puerto palmesano por su fuerte olor a pintura.

El agua llegará también de Francia, tanto del Canal de Provenza, como de la ciudad de Marsella. En total serán 189 viajes que tendrán un coste de 53 millones de euros.

Tarragona condiciona el uso del agua

El alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, ha anunciado que dará la orden a la empresa municipal de aguas Ematsa de dejar de extraer agua de los acuíferos municipales de la ciudad para enviarla a Barcelona. El alcalde afirma que tomará la medida si se permite el uso del agua transportada para usos ornamentales y llenado de piscinas.

Sin embargo, tanto el presidente de la Generalitat, José Montilla, como el conseller de Medio Ambiente y Vivienda, Francesc Baltasar, han anunciado modificaciones en el Decreto de Sequía para poder mantener estas restricciones de forma que continúe el ahorro de agua, pese a la salida de Excepcionalidad II.

Por otro lado, el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT) acordará mañana llevar agua del minitrasvase del Ebro con barcos hacia el área metropolitana, lo que también hará innecesario continuar las extracciones de agua de los pozos.

De todos modos, el Consistorio insistió en que el agua de los acuíferos está a disposición de los municipios del Camp de Tarragona que la requieran, y recalcó que "el esfuerzo de Tarragona y Reus (Tarragona) no servirá para usos ornamentales".