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Copa Davis 2019

Un excelso Nadal pone luz en la Davis que no duerme

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El tenista español Rafa Nadal celebra un punto en la final de Copa Davis.
El tenista español Rafa Nadal celebra un punto en la final de Copa Davis.

La victoria de España en la Copa Davis de Madrid ha dejado varias conclusiones. El triunfo de Rafa Nadal sobre Denis Shapovalov que daba la sexta 'Ensaladera' a nuestro tenis, ponía el broche a una semana en la que se estrenaba un nuevo formato: 18 selecciones, todos contra todos, y unos horarios en el punto de mira de las críticas.

El formato inaugurado este año en Madrid se ponía a examen. La ITF aprobó el año pasado el cambio de un torneo centenario, impulsado por el grupo Kosmos de Gerard Piqué Necesitaba el aval de los jugadores, sobre todo, y de los aficionados. Nadal y Djokovic, número uno y dos del mundo, se lo aseguraron con su presencia.

El nivel de Nadal y la emoción de Bautista

Si alguien ha dado caché a esta nueva Davis es el mejor tenista de la actualidad. Rafa ganó ocho partidos, tres de ellos de dobles, y mostró una autoridad en su juego incontestable. Desde que debutara perdiendo en 2004 ha ganado 29 partidos individuales consecutivos y tiene un balance de 8-4 en dobles.

El propio líder de la 'Armada' otorgó gran parte del mérito a Roberto Bautista, que se repuso del mazazo que suspuso la muerte de su padre para poner el 1-0 en la final contra Canadá.

Bautista ha sido el único español en estas finales capaz de ganar partidos individuales al margen de Nadal. Se quedó a las puertas de las ATP Finals tras un gran año en que acabó como número nueve del mundo. Esta Davis también es suya.

Otra de las notas positivas de este equipo, en la que también tiene que ver Nadal, es la compenetración de las parejas de dobles: hasta tres distintas ha utilizado el capitán Sergi Bruguera. Feliciano López y Marcel Granollersganaron el otro de los once puntos en que no estuvo presente Rafa, el de dobles contra Rusia.

En 2011, en Sevilla, nada más ganar la quinta los Nadal, Feliciano, Granollers y compañía ponían en duda su continuidad en la competición; ahí siguen en 2019.

Las otras Copas Davis de España

En este mismo lado de la balanza merece un sitio Canadá, que con jugadores jóvenes y apenas rotando se plantaron en la primera final de su historia. Muy meritorio su trabajo y su esfuerzo.

Los horarios, la sombra más larga

Si hubiera que poner un 'pero' a esta Davis en el que coincidiera prácticamente todo el mundo es el de los horarios. Hasta el propio Gerard Piqué tuvo que salir al paso para admitirlo y sugerir una cuarta pista para descongestionar.

El dobles de Italia - Estados Unidos del miércoles acabó el jueves... a las cuatro de la madrugada. Las jornadas vespertinas estaban programadas a las seis de la tarde, que en realidad era un "no antes de". Si el inicio se retrasaba por el alargamiento de la sesión anterior y se iba al dobles, malo.

En cuanto a la presencia de aficionados, la semana se ha salvado por el tirón de la afición española. De no haber llegado España a la final, se habría visto otra cosa. Argentina también dio ambiente de Davis, mientras que Gran Bretaña tuvo que regalar entradas para que los suyos animaran en semifinales contra los nuestros.

El modelo de 18 equipos en una semana se ha antojado demasiado comprimido. Habrá que ver la ATP Cup de enero en Australia, que son 24 en nueve días (del 3 al 12).

El equipo español vivió en primera persona lo problemático de los horarios el martes en su debut, el viernes en cuartos y el sábado en semifinales. Rafa Nadal lo dijo en rueda de prensa, pero respaldó a Piqué pidiendo un acuerdo entre ITF y ATP con Kosmos.

Lo mismo hizo Djokovic, quien como presidente del consejo de tenistas es la cara visible de la 'competencia', reclamando la fusión de ambas competiciones. El futuro sigue abierto y la historia está por escribir. Pero en este primer capítulo manda España.

Fe de erratas

En la versión inicial de esta noticia se publicó que el balance de Rafa Nadal en dobles en la Copa Davis era de 7 partidos ganados y 4 perdidos. Tras una comprobación posterior, el dato correcto es de ocho victorias y cuatro derrotas.