Serbia resucita y complica a Alemania

• Victoria de Serbia con gol de Jovanovic (0-1)
• Alemania jugó con uno menos por expulsión de Klose
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Resumen del Alemania 0-1 Serbia

Ficha técnica:

0 - Alemania: Manuel Neuer; Lahm, Mertesacker, Arne Friedrich, Holger Badstuber (Mario Gómez, m.77); Mesut Ozil (Marko Marin, m.71), Bastian Schweinsteiger, Sami Khedira, Thomas Müller (Cacau, m.70); Miroslav Klose y Lukas Podolski.

1 - Serbia: Vladimir Stojkovic; Branislav Ivanovic, Neven Subotic, Nemanja Vidic, Aleksandar Kolarov; Milos Krasic, Milos Ninkovic (Gojko Kacar, m.70), Zdravo Kuzmanovic (Radosav Petrovic, m.75), Dejan Stankovic, Milan Jovanovic (Danko Lazovic, m.79); Nikola Zigic.

Goles: 0-1, m.38. Jovanovic.

Árbitro: Alberto Undiano Mallenco (España). Tarjetas amarillas a Klose (2, la segunda en el m.37, por lo que fue expulsado), Khedira, Lahm y Schweinsteiger por Alemania, y a Ivanovic, Kolarov, Subotic y Vidic por Serbia.

Incidencias: partido del grupo D, disputado en el estadio Nelson Mandela de Puerto Elizabeth ante unos 40.000 espectadores.

En un Mundial de fútbol, sobre todo en la fase de grupos, la tortilla puede dar muchas vueltas. Eso es lo que le ha pasado a Alemania después de perder (0-1) contra Serbia. De la misma forma, los de Antic resucitan tras la derrota ante Ghana en el debut.

Los alemanes venía de golear a Australia y partían como favoritos, pero la doble amarilla mostrada por el español Undiano Mallenco a Klose les complicó el partido. Con uno menos recibieron el gol de Serbia y fueron incapaces de remontar.

El colegiado español se ha convertido en involuntario protagonista del encuentro por la expulsión. Muy acertado con las tarjetas hasta ese momento, la seguna mostrada a Klose fue más discutida.

No fue, sin embargo, el principal 'villano' para los alemanes, sino su delantero -otrora estrella- Lukas Podolski que, por fallar, falló hasta un penalti en la segunda parte.

Antes de la expulsión, los de Joachim Loew dominaban el partido pero no encontraban la llave para abrir el candado propuesto por Radomir Antic. Los serbios, lejos de esperar agazapados, complicaban la circulación del balón desde la salida a los germanos.

La selección balcánica se confiaba a la velocidad de Jovanovic y Krasic para aprovechar un robo de balón y lanzar un contragolpe. De esa manera llegó el único gol del encuentro.

El balón llegó a la banda derecha, desde donde un enorme Miroslav Krasic puso un centro al segundo palo que Zigic cedió al área pequeña. Allí esperaba Jovanovic libre de marca, en un error de Friedich y Mertesacker, para batir a bocajarro a Neuer (40').

Los serbios enloquecieron y celebraron el tanto con sus compatriotas en la grada como si fuera la final del Mundial. No era la final, pero sí la esperanza de pasar de fase, algo que se le iba complicando a Alemania.

La tricampeona, fiel a su estilo

La triple campeona del mundo no se descompuso a pesar del gol. Siguió fiel a su estilo en lo que restaba de primera mitad y al inicio de la segunda.

Schweinsteigger tiró de galones y Özil de calidad, mientras que Podolski ponía las ganas y poco más. El delantero de origen polaco tuvo las ocasiones de empatar en sus botas, más de una.

Pero la más clara fue sin duda la del penalti, una pena máxima regalada por Vidic al intentar despejar con la mano un centro desde la izquierda. Lanzó Podolski, pero Stojkovic se convirtió en el segundo héroe de los serbios al detener el tiro.

El fallo fue el mazazo definitivo para Alemania, que no logró encontrar aire ni siquiera con la entrada del talento de Cacau y Marin. En los minutos finales Loew echó el resto con Mario Gómez.

Sin embargo, fueron los serbios los que empezaron a crear las ocasiones de sentenciar, como un cabezazo al larguero del ex valencianista Nicola Zigic. Tanto perdonar debería haberles pasado factura, pero por suerte para los de Antic los alemanes ya habían arrojado la toalla.