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En Los Ángeles, ya se han desplegado 4.000 miembros de la Guardia Nacional y más de 700 marines por orden del presidente estadounidense, Donald Trump, para sofocar las protestas por las redadas contra migrantes sin papeles. Las manifestaciones se convocan a través de redes sociales donde la mayoría de los asistentes son estadounidenses, hijos de migrantes indocumentados.

En el seno de la política, el gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, y Trump continúan con su enfrentamiento particular ante la política migratoria del presidente. Newsom ha manifestado que la iniciativa del despliegue de tropas es una "estrategia política para convertir las protestas en actos violentos"

IMAGEN: EFE/EPA/Allison Dinner

El Ejército estadounidense enviará temporalmente unos 700 marines a Los Ángeles para contener las protestas contra las redadas migratorias y hasta que lleguen a la ciudad refuerzos de la Guardia Nacional. El Gobierno de Donald Trump, además, ha convocado a otros 2.000 soldados de dicha guardia, con lo que la cifra de desplegados asciende a más de 4.000.

Trump ordenó el sábado el despliegue de 2.000 miembros de la Guardia Nacional de California para, según él, contrarrestar manifestaciones focalizadas, que ya fueron controladas y no representaban ningún problema de seguridad, una medida que los demócratas calificaron de "provocación innecesaria".

El Pentágono ha explicado en un comunicado que la "activación de los Marines" tiene como objetivo proporcionar al dispositivo "un número suficiente de efectivos para brindar cobertura continua".

FOTO: DANIEL COLE/REUTERS

Continúa la tensión en Los Ángeles por las protestas contra las redadas antiinmigrantes. Las fuerzas de seguridad vigilan el centro de la ciudad, donde han prohibido las concentraciones. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, desplegó a la Guardia Nacional en contra de la voluntad de las autoridades californianas, del Partido Demócrata, una decisión muy poco usual, por la que el gobernador del Estado ha demandado a la Administración de Trump, que amenaza con arrestarle.

Foto: BLAKE FAGAN / AFP

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha descrito este domingo a Los Ángeles como una ciudad "invadida y ocupada por inmigrantes ilegales y criminales" y ha asegurado que las protestas desatadas en respuesta a las redadas masivas de migrantes "fortalecen" su determinación de deportar.

"Estos disturbios sin ley solo fortalecen nuestra determinación. Estoy ordenando a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem; al secretario de Defensa, Pete Hegseth; y a la fiscal general, Pam Bondi (...) que tomen todas las medidas necesarias para liberar a Los Ángeles de la invasión de inmigrantes y poner fin a estos disturbios de inmigrantes", ha escrito el mandatario en Truth Social.

Los comentarios de Trump llegan en el tercer día consecutivo de protestas en la ciudad de Los Ángeles y después de que el viernes el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) realizara al menos siete redadas migratorias.

FOTO: EFE/CAROLINE BREHMAN

Batalla campal en Los Ángeles. Los manifestantes, muchos con banderas latinas, lanzan piedras y otros objetos contra los agentes. Estos, granadas aturdidoras y gases lacrimógenos.

Crecen los disturbios en el segundo día de protestas contra las redadas antiinmigración de Trump en la segunda ciudad de Estados Unidos.

Frente al estallido de violencia, la Administración Trump anuncia más mano dura y el despliegue de 2.000 soldados de la Guardia Nacional. El gobernador de California, demócrata, cree que es una medida "desquiciada", que solo inflamará más la tensión.

Mientras los migrantes se levantan contra las redadas y las deportaciones masivas, Trump, implacable, sigue escalando su ofensiva contra la inmigración irregular.

Foto: REUTERS/Barbara Davidson

Botes de humo por los suelos, vehículos calcinados... Nueva jornada de protestas en Los Ángeles por las redadas contra la comunidad hispana. La tensión es máxima. Los disturbios más importantes se han localizado en Paramount, al sudeste de la ciudad.

Ahí, las fuerzas de seguridad han empleado granadas aturdidoras, pelotas de goma o gas pimienta para dispersar a las masas. Más de un centenar de personas han sido detenidas, varias de ellas, aseguran desde el Gobierno, relacionadas con bandas criminales.

Donald Trump elogia el trabajo de las fuerzas de seguridad en Los Angeles y critica al gobernador de California y a la alcaldesa de la ciudad, ambos demócratas, por la gestión de la crisis. Ambos rechazan la actuación "desmesurada", dicen, del gobierno republicano

La Casa Blanca quiere llevar a cabo su plan antiinmigración. Su objetivo: detener a 3.000 personas cada día, la mayor deportación de los Estados Unidos, una de las principales promesas electorales de Trump.

Foto: REUTERS/Mike Blake

Es el enfrentamiento entre policía y manifestantes en el centro de Los Ángeles, en Estados Unidos. Así terminaba una jornada de redadas de agentes de inmigración en varios puntos de la segunda ciudad del país. Hay decenas de detenidos, en el mismo día en el que el salvadoreño Kilmar Ábrego, deportado por error, ha sido devuelto a Estados Unidos.

Foto: REUTERS/Daniel Cole