Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Al menos 21 personas han muerto y 18 han resultado heridas este martes tras caer un autobús desde un paso elevado en Mestre, cerca de Venecia, al norte de Italia. Así lo ha confirmado el alcalde de la ciudad, Luigi Brugnaro, en su cuenta de X, antes Twitter.

El siniestro ha ocurrido poco después de las 19:30 horas locales (17:30 GMT), cuando el autobús se precipitó por la pasarela, que cruzaba la autopista, y cayó entre un almacén y las vías del tren.

Las víctimas "son sobre todo turistas y ciudadanos ucranianos", ha informado el ministro de Transportes, Matteo Salvini, a la televisión pública RAI. No obstante, otros medios han afirmado que también puede haber víctimas alemanas y búlgaras que se alojaban en un camping cercano al lugar del accidente.

Foto: AFP/MARCO SABADIN

En Marsella, en Francia, la policía investiga la muerte a tiros de dos personas en plena calle, en lo que parece ser un ajuste de cuentas. Se trata de la ciudad con las tasas más altas de criminalidad de toda Francia y también la que tiene los barrios periféricos más pobres del país.

Rodeado con un muro como si fuera una fortaleza, entramos en una de las zonas más peligrosas del norte de Marsella. Es la ciudad con los barrios más pobres de Europa y que se han acabado convirtiendo en guetos.

"Puede haber un enlace entre pobreza, migración y seguridad, pero olvidamos que estas personas son portadoras de valores y de una cultura, que puede ser más fuerte que la francesa", dice Jean Vercoutére, delegado de Cáritas en Marsella, para quien la ciudad es, al contrario de lo que muchos piensan, un modelo de convivencia de etnias y religiones.

Se cumplen 10 años de la tragedia de Lampedusa: murieron cerca de 400 migrantes, que naufragaron cuando trataban de llegar a Europa. El Gobierno italiano no ha participado en los actos de recuerdo. Las ONG lamentan que hayamos normalizado estas tragedias.

Diez años no han conseguido apagar el dolor. Esta madrugada, a la misma hora del naufragio, han recordado a los 368 muertos. Algunos de estos son supervivientes eritreos que han regresado al lugar en el que vieron morir a los suyos, descargar uno tras otro los cadáveres y alinear los féretros en aquel pabellón de imborrable memoria.

La tragedia movilizó una operación de rescate que llamaron Mare Nostrum, de la que hoy no queda nada.

Las ONGs lamentan que no exista ninguna política gubernativa de búsqueda y rescate, y mucho menos de acogida e integración de inmigrantes.

FOTO: Zakaria ABDELKAFI / AFP

Ander Izagirre escribe en su firma en Las mañanas de RNE sobre la historia de migración de un millón de portugueses que en 1965 escaparon de su país: "Huyeron de la pobreza, la dictadura y las guerras coloniales; de ellos, 800.000 emigraron a Francia, la mayoría de forma clandestina y casi todos a través de Bidasoa y del Pirineo".

Pello Apezetxea descubrió estos "movimientos inquietantes en los bosques" días después de su llegada como párroco de Etxalar y que contó al periodista: "El viejo cura contaba historias de vecinos que ayudaron a los migrantes y de otros que los estafaron: hay gente que hace negocio con todo".

"Solo me viene la palabra vergüenza, es una vergüenza". El Papa Francisco reflejó con esas palabras la mezcla de rabia, indignación y dolor del mundo hace diez años tras el naufragio de Lampedusa, que dejó 368 personas muertas en una de las mayores tragedias que se recuerdan en el Mediterráneo.

Una década después, el fenómeno no solo no se ha detenido, sino que continúa entre políticas errantes y titubeos. Desde entonces, la isla ha quedado marcada por la palabra migración.

José Manuel Albares, ministro de Exteriores de España, ha afirmado en La Hora de La 1 que Ucrania tendrá de la UE "todo el apoyo diplomático, humanitario y militar" y que "en todas las conversaciones que tengo con la administración Biden no hay duda de que el apoyo estadounidense va a continuar".

"Mantener la unidad en torno a la defensa y la soberanía e integridad territorial de Ucrania es una de nuestras grandes prioridades", ha añadido Albares desde Lublin, Polonia, de regreso de Ucrania.

El ministro español ha asegurado que los 27 han hablado "con una sola voz" durante la reunión del consejo informal celebrado el lunes en Kiev.

Albares no ha confirmado si Zelenski va a acudir el jueves a la cumbre de la Comunidad Política Europea, que se celebrará en Granada el próximo jueves.

Foto: Albares junto a su homólogo ucraniano, Dmitro Kuleba, en Kiev. EFE/ @jmalbares de la red social X (antes twitter)