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Bruselas propone multar con 250.000 euros por refugiado a los países que no cumplan las cuotas

  • El comisario de Migración: "El reglamento de Dublín ha muerto"
  • La UE avala la prolongación de los controles de fronteras dentro de Schengen

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Migrantes en el campo de alojamiento provisional de Hellenikon, en Atenas, Grecia. REUTERS/Alkis Konstantinidis
Migrantes en el campo de alojamiento provisional de Hellenikon, en Atenas, Grecia. REUTERS/Alkis Konstantinidis

La Comisión Europea va a proponer a los países miembros un sistema para la distribución de los refugiados que penaliza a aquellos países que no están dispuestos a aceptar la imposición de cuotas.

Dicho sistema incluye "multas" a estos países de hasta 250.000 euros por refugiado no admitido.

"Si un Estado miembro no participa deberá apoyar a los que sí lo hacen", ha explicado en rueda de prensa el vicepresidente primero de la CE, Frans Timmermans, quien considera este pago como una forma de "solidaridad".

Si un Estado miembro no participa deberá apoyar a los que sí lo hacen

Fuentes comunitarias citadas por Efe han explicado que la cifra de 250.000 euros se ha calculado teniendo en cuenta los gastos que supone el trasladado de solicitantes de asilo y como elemento disuasorio para intentar que todos los países de la UE participen en el sistema de cuotas.

No obstante, cualquier reforma del sistema de acogida, rechazado por la mayoría de países del Este y del que están excluidos Reino Unido, Irlanda y Dinamarca, requiere la aprobación de una mayoría de gobiernos comunitarios.

El comisario europeo de Migración: "El reglamento de Dublín ha muerto"

El comisario de Migración: "El reglamento de Dublín ha muerto"

El comisario de Migración, Dimitris Avramopoulos, ha explicado que el reglamento de Dublín va a ser reformado para adoptar un sistema automático de cuotas de reparto entre los Veintiocho cuando algún estado miembro afronte un flujo migratorio inesperado, como ocurre con la actual crisis de refugiados que afecta sobre todo a Grecia e Italia.

La propuesta mantiene el principio del país de entrada, según el cual el responsable de tramitar la demanda de asilo es el país por el que el refugiado ha accedido a territorio comunitario. Pero, en el caso de que un país vea rebasada su capacidad de acogida en un 150%, se activará el citado mecanismo automático de reparto entre los socios comunitarios.

La capacidad de acogida será calculada en función de la población y del PIB (con un peso del 50% cada uno).

"El viejo reglamento de Dublín ha muerto de muerte natural porque no podía funcionar", ha explicado Avramopoulos.

Hasta ahora, sólo 1.441 refugiados han sido reubicados, en comparación con los 160.000 previstos.

El rechazo de los nacionalistas centroeuropeos

De "chantaje" ha calificado Hungría estos planes sobre distribución de refugiados. Paralelamente, los ministros de Exteriores de República Checa, Eslovaquia y Polonia, reunidos en Praga, han rechazado el conjunto de medidas.

"La idea de las cuotas es un callejón sin salida, y quisiera rogar a la Comisión Europea que no insista en ese camino", ha dicho Peter Sziijarto, responsable de Exteriores húngaro.

Para Mariusz Blaszczak, ministro de Interior polaco, la propuesta "no tiene sentido" y viola los derechos de los países miembros.

Prolongación de los controles dentro de Schengen

La Comisión Europea ha propuesto también permitir la prolongación de controles fronterizos dentro del espacio de libre tránsito de Schengen, establecidos por algunos países.

La Comisión propondrá extender otros seis meses los controles que aplican Alemania, Austria, Suecia, Dinamarca y Noruega, ya que aún existen deficiencias en los controles de las fronteras exteriores de Grecia.

El Ejecutivo comunitario destaca que Grecia ha logrado "un progreso significativo" pero no ha conseguido corregir todas las "serias deficiencias" detectadas en el plazo de tres meses que le había dado Bruselas.