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Estallan enfrentamientos entre palestinos e israelíes en Jerusalén oriental

  • Incidentes tras el rezo del primer viernes de Ramadán
  • Miles de personas se reúnen en el funeral del joven palestino asesinado
  • Las autoridades israelíes aún no han entregado el cuerpo

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Multitudinario funeral del joven palestino supuestamente asesinado en venganza por la muerte de tres israelíes

La tensión creciente entre israelíes y palestinos amenaza con desbordarse en Jerusalén, donde coincide la celebración islámica del primer viernes del Ramadán con el funeral por el joven palestino Mohamed Abu Jedeir.

La Policía israelí ha disparado granadas de sonido para dispersar a los palestinos que se habían reunido en un barrio del este de la ciudad tras los rezos del mediodía. Miles de palestinos acuden cada viernes a la Explanada de las Mezquitas, situada sobre el Muro de las Lamentaciones, en la ciudad santa, y la coincidencia con el mes de ayuno había llevado a las autoridades israelíes a reforzar la seguridad.

Mientras tanto, en el barrio de Shuafat miles de personas se han congresgado para asistir al funeral de Jedeir, asesinado el pasado miércoles. La Policía israelí investiga si su asesinato fue una venganza de radicales judíos por el secuestro y asesinato de tres jóvenes judíos en Hebrón.

Funeral sin el cadáver del joven palestino

Al grito de "la sangre de los mártires nos redimirá" y en un ambiente de tensión, jóvenes enmascarados, ancianos, mujeres y niños de Shuafat han rendido homenaje al fallecido, de 16 años, cuyo cadáver apareció quemado y con signos de violencia en un bosque.

A pocos metros, en la casa familiar, allegados y vecinos esperaban la entrega del cadáver por parte de las autoridades israelíes, que han retrasado este momento aduciendo la necesidad de practicar la autopsia.

"No nos han querido entregar el cadáver. No han querido que el pueblo palestino entierre al joven como ellos enterraron a sus tres jóvenes entre miles de personas", ha declarado a Efe un familiar del fallecido que no quiso identificarse.

Desde que fue descubierto el cuerpo, más de 300 personas han resultado heridas en los enfrentamientos entre palestinos y la policía israelí en varias zonas de Jerusalén.

El asesinato del adolescente palestino se produjo después de que Israel enterrara, en una ceremonia multitudinaria de duelo nacional, a los tres jóvenes israelíes que desaparecieron el 12 de junio. Los jóvenes estudiantes fueron hallados sin vida casi tres semanas después de su desaparición y el hecho despertó una ola de ataques antiárabes por parte de nacionalistas judíos.

El Gobierno de Israel culpa a los radicales islamistas de Hamás y ha movilizado tropas en la frontera con Gaza, aunque este grupo ha rechazado toda implicación y otra organización, hasta ahora desconocida y que dice deber lealtad al Ejército Islámico de Irak y el Levante (EIIL), ha reivindicado el crimen.