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Cuatro imputados por intentar un ciber robo en una oficina del Banco Santander de Londres

  • Doce hombres fueron detenidos, ocho quedaron en libertad bajo fianza
  • Los detenidos querían colocar un dispositivo informático para realizar el robo

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Cuatro hombres de entre 25 y 35 años han sido imputados por la corte de magistrados de Westminster, en el centro de Londres como presuntos responsables del intento de un ciber crimen contra el banco de Santander en la capital británica. Según Scotland Yard, las fuerzas del orden detuvieron este pasado jueves a doce hombres de entre 23 y 50 años con apellidos como presuntos responsables del intento de robo. La banda presuntamente operaba desde una pequeña oficina en un cobertizo en Hounslow, al oeste de Londres.

La división de ciber crimen de la policía metropolitana ha señalado que el descubrimiento del hecho se produjo al sospechar que el banco estaba siendo atacado por piratas informáticos, aunque no estaban seguros de qué tipo de ataque se trataba. Los cuatro imputados son Lanre Mullins-Abudu, de 25 años; Dean Outram, de 34; Akash Vaghela, de 27, y Asad Ali Qureshi, de 35.

Aunque ocho de los doce detenidos han quedado en libertad bajo fianza, la policía continúa con las investigaciones para conocer al detalle cómo se iba a llevar a cabo el robo en la sucursal del Santander en la zona de Surrey, al sur de la capital.

Un falso técnico de British Telecom se presentó en la oficina

De momento se sabe que los detenidos querían colocar un dispositivo destinado a garantizar y controlar el buen funcionamiento de las redes   en un ordenador de la oficina desde donde iban a tratar de hacer esclavos al resto de computadoras de la sucursal bancario.

Al parecer, un falso técnico de mantenimiento de la British Telecom que se presentó en la sucursal habría intentado, sin conseguirlo, ubicar un controlador con un sistema wi-fi en uno de los terminales de la oficina.

A través de este sistema, que puede adquirirse en las tiendas de informática por no más de 10 euros, podrían haber transferido electronicamente una cantidad muy importante de fondos a otras cuentas . El dispositivo que el falso ingeniero pretendía colocar en la oficina bancaria es, según la policía, un aparato de uso frecuente por los celosos para espiar la actividad en línea de su pareja, pero también son utilizados por los departamentos de informática de las empresas para acceder a varios equipos desde un equipo remoto.

Según el banco, en el hecho no hay participación de ningún empleado del Santander y no se ha echado en falta cantidad alguna. A pesar de ello, según la policía, de haberse consumado el delito la cantidad de dinero robada podría haber sido muy alta.