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El número de cebras, jirafas y leones africanos cae en picado en los últimos 40 años

  • En las últimas cuatro décadas el número de animales se ha reducido en un 60%
  • La situación es peor en el oeste africano, las poblaciones han caído un 85%
  • Muchos de estos animales siguen bajo la amenaza de los cazadores furtivos

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Una joven cebra corriendo en un parque nacional
Una joven cebra corriendo en un parque nacional

Leones, jirafas y cebras desaparecen a pasos agigantados de las reservas africanas, amenazados principalmente por los cazadores furtivos.

El número de grandes mamíferos africanos ha descendido drásticamente en las últimas cuatro décadas. Sus poblaciones han caído un 60% en los parques nacionales del país.

Así lo revela un estudio elaborado por la Sociedad Zoológica de Londres y la Universidad de Cambridge. Los científicos advierten que en diferentes áreas protegidas como el Serengeti, en Tanzania, o el Masai Mara, en Kenia, no se ha conseguido preservar las especies de grandes mamíferos que siguen bajo la amenaza de cazadores furtivos.

El informe, publicado en la revista 'Biological Conservation', revela que el problema es especialmente acusado en el oeste africano, donde las poblaciones de mamíferos han decrecido hasta un 85%.

Los científicos creen que esta zona de África es más vulnerable porque tienen menos recursos para hacer frente a la amenaza de los cazadores, que se dedican, en muchos casos, al comercio de la carne de animales salvajes.

La situación tampoco mejora al este del continente, donde miles de turistas visitan anualmente algún parque nacional donde el número de grandes mamíferos se ha reducido casi a la mitad, motivado por el aumento del número de personas que viven en esta zona y que está acabando con los recursos.

Los resultados son mucho peores de lo esperado, aunque el incremento del número de ejemplares en la zona sur da algo de esperanza. "Esto demuestra que las áreas protegidas pueden ser efectivas para procurar la conservación de grandes mamíferos, si se cuenta con los recursos suficientes", afirmó Jonathan Baillie, uno de los responsables de la investigación.