Simulaban embarazos y aprovechan para desvalijar casas: Más de 50.000 euros robados con la técnica "hurto amoroso"
- Las detenidas usaban la técnica de pedir un vaso de agua y acceder a la casa a robar
- En total, se habrían hecho con un botín de joyas y dinero valorado en 52.000 euros de seis víctimas
Dos mujeres han sido detenidas, en Zaragoza, por robar más de 50.000 euros a personas vulnerables con la técnica del "hurto amoroso". Las presuntas autoras fingían estar embarazadas y abordaban a los ancianos a pie de calle. Les solicitaban agua con la intención de que las invitaran a subir a sus casas y aprovechando su estado de gestación, se ganaban la confianza de los ancianos. Posteriormente, les robaban.
¿Cuál es el perfil de la víctima?
Según ha explicado en Mañaneros 360 Rubén Nido, portavoz de la Policía Nacional de Zaragoza, las atracadoras buscaban a personas mayores y con algún tipo de movilidad reducida para atacarles. Estas bandas "son expertas en este tipo de robos" y "no utilizan ni la fuerza para acceder a esa vivienda, ni tampoco violencia o intimidación a estas personas mayores, sino que engatusaban a sus víctimas con cualquier tipo de excusa para aprovecharse de su vulnerabilidad".
Su modus operandi
En todos sus hurtos llevaban a cabo la misma operación: "Generalmente actuaban en pareja. Una de ellas se acercaba a personas mayores y les decía que estaba embarazada, pidiéndoles si podían ofrecerle un vaso de agua. Luego, los acompañaba hasta su domicilio. Al llegar, esta primera mujer entraba con la persona mayor, trataba de entretenerla en el interior, pero dejaba la puerta entreabierta. Mientras tanto, la segunda mujer entraba tranquilamente en la vivienda y se pasaba por todas las habitaciones, como si estuviese por su casa, robando, sobre todo, joyas y dinero", ha explicado el agente de seguridad en el magazine de RTVE. En total, se habrían hecho con un botín de joyas y dinero valorado en 52.000 euros de seis víctimas.
No solo operaban en Zaragoza
Tal y como ha explicado Rubén Nido, portavoz de la Policía Nacional de Zaragoza, estas mujeres eran residentes en la Comunidad de Madrid y se desplazaban a diferentes puntos de España para cometer sus actos delictivos. En sus palabras: "A Zaragoza, vinieron el pasado mes de mayo y estuvieron durante unos días actuando. En ese tiempo, robaron a más de seis personas mayores en sus domicilios, y luego regresaron a Madrid. La semana pasada, mis compañeros de delincuencia itinerante sabían que iban a regresar otra vez a Zaragoza para cometer nuevos delitos. Por eso, montaron un dispositivo para detenerlas directamente cuando salieran del autobús".
