El padre Ángel, en 'Plano General'
- "El secretario general mío es el Papa Francisco, no es ni Pedro Sánchez ni Feijóo"
- "El problema de la sociedad no es subir las pensiones, el problema es que nos queremos poco"
- Se avergüenza de "los abusos sexuales" en la Iglesia pero condena también "los abusos económicos y políticos"
- Viernes 20 de enero en La 2 a las 21:25 horas, y en La 1, Canal 24 horas y TVE Internacional, el domingo a las 6:30 horas
El sacerdote Ángel García Rodríguez, de 85 años, recibe a ‘Plano General’, dirigido y presentado por Jenaro Castro, en la madrileña iglesia de San Antón, abierta las 24 horas del día a las personas sin techo.
El padre Ángel, que ha sido recibido recientemente en Ciudad del Vaticano por el Papa Francisco, reconoce que "la pobreza es una realidad". Al pie del altar donde dice misa, entre dos imágenes del Papa y de la madre Teresa de Calcuta, el padre Ángel confiesa que ha pecado, que tiene ideología política y que ha cambiado varias veces de voto electoral.
En una entrevista en la que se muestra muy sincero, el padre Ángel quiere que en su epitafio se reconozca que "fue capaz de entenderse y hacer entenderse a unos y otros". Dice que actualmente hay que "rezar por el presidente del Gobierno igual que antiguamente se rezaba por Franco" y cree que "habría que confesar a todos los políticos" para perdonar los pecados. El padre Ángel, que ejerce de asturiano en 'Plano General', se reconoce un admirador de la música de su paisano Víctor Manuel, que escucha cuando está de bajón. Y afirma que "Dios es amor y que sin amor no se puede vivir".
El padre Ángel se somete a todas las secciones del programa: La semblanza (dedicaba al aspecto biográfico de los invitados en la que ha elegido a su amigo el economista Aldo Olcese), Sala de prensa (en la que los personajes hablan de asuntos de actualidad), En un rincón del alma (relativa al aspecto humano de nuestros entrevistados), Primer plano (en la que el personaje se somete a un test de reflejos e ingenio) y El muro (en la que el personaje entrevistado nos deja una frase firmada de su puño y letra como filosofía de su propia personalidad).