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Trump rebaja la clasificación del cannabis para fomentar la investigación médica

  • La orden "no legaliza la marihuana de ninguna manera", aclara el presidente en el acto de firma
  • Saca la marihuana de la categoría de la heroína y la incluye en la que se encuentra, por ejemplo, la ketamina
Un hombre con traje azul y corbata roja sostiene un documento con texto y una firma, posiblemente una orden o ley, mientras otras personas se encuentran en el fondo.
RTVE.es / AGENCIAS

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este jueves una orden que rebaja la clasificación del cannabis en las categorías de peligrosidad de las drogas para facilitar la investigación médica con esta sustancia.

"Quiero recalcar que la orden que estoy a punto de firmar no legaliza la marihuana de ninguna manera, ni en ningún sentido, y de ninguna forma autoriza su uso como droga recreativa", ha aclarado en el acto en la Casa Blanca.

El texto saca la marihuana de la categoría I de narcóticos —donde se encuentra la heroína, el LSD o el éxtasis— para situarla en la categoría III, la que tiene, por ejemplo, la ketamina, una decisión que puede dar un giro a la industria del cannabis, suavizar las sanciones penales y desbloquear fondos para investigación.

El expresidente demócrata Joe Biden había impulsado esta medida, pero el cambio no llegó a materializarse. Ahora, queda pendiente del dictamen de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA).

"Hay gente rogándome que haga esto, gente que lleva décadas sufriendo un gran dolor", ha declarado Trump este jueves en el Despacho Oval, donde ha estado acompañado por profesionales oncológicos, pacientes de cáncer y representantes de la industria farmacéutica.

Dentro del programa Medicare

La orden insta también a la creación de un programa piloto para reembolsar a pacientes del programa de salud Medicare (que cubre a mayores de 65 años y personas con ciertas patologías) por la compra de productos elaborados con cannabidiol (CBD), el compuesto del cannabis que no tiene propiedades psicoactivas.

Una alta responsable del Gobierno ha explicado que es una decisión de "sentido común", puesto que "casi uno de cada cuatro adultos estadounidenses sufre dolor crónico, y más de uno de cada tres ancianos". La marihuana y los productos de CBD, ha señalado, ya se utilizaban por esta clase de pacientes y la decisión permitirá investigar más sobre los riesgos de adicción.

El consumo recreativo de cannabis es legal en 24 de 50 estados estadounidenses y en Washington D.C., pero no a nivel federal.