Fuerzas israelíes matan a 13 personas en Siria en el ataque más letal desde la caída de Bachar al Asad
- Israel ha atacado por tierra y bombardeado la localidad de Beit Jinn, a las afueras de Damasco
- Entre las víctimas hay mujeres y niños, y el Gobierno sirio denuncia "un crimen de guerra"
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Al menos 13 personas han muerto, entre ellas mujeres y niños, y varias decenas han resultado heridas este viernes en una serie de ataques terrestres y aéreos perpetrados por las fuerzas israelíes contra la localidad siria de Beit Jinn, a las afueras de Damasco.
El Gobierno sirio ha denunciado lo sucedido como un "crimen de guerra absoluto", y ha denunciado que Israel está llevando a cabo una estrategia para desestabilizar la región.
Se trata del ataque más letal cometido por Israel en suelo sirio desde la caída del régimen de Bachar al Asad, hace casi un año.
Ataque en suelo sirio
Las fuerzas israelíes han bombardeado Beit Jinn a las 3:40 de la madrugada, hora local, y después sus tropas han penetrado en la localidad, según la agencia estatal de noticias siria SANA. Los habitantes se han enfrentado a los soldaos, que han respondido con disparos.
La acción ha costado la vida al menos 13 sirios, entre ellos mujeres y niños, aunque puede haber más víctimas entre los escombros. Según el Ministerio de Exteriores sirio, los residentes se han visto forzados abandonar sus hogares.
Walid Akasha, un funcionario local en Beit Jinn, ha asegurado que los habitantes del pueblo son "pacíficos, población civil, granjeros". "Tenemos el derecho legítimo a defendernos. No les hemos atacado primero, vinieron ellos a nuestra tierra", ha declarado a Reuters.
Akasha ha recordado que siete habitantes del pueblo fueron secuestrados por los israelíes el pasado junio, y que desde entonces no se sabe nada de ellos. El Ejército israelí aseguró que se trataba de miembros del grupo palestino Hamás, pero el Ministerio sirio de Interior aseguró que eran civiles.
Funeral por las víctimas del ataque israelí contra Beit Jinn, en Siria EFE/EPA/MOHAMMED AL RIFAI
Israel ha reconocido el ataque contra Beit Jinn, que constituye una violación de las leyes internacionales, y lo ha calificado como una acción rutinaria. Ha asegurado que su objetivo era detener a milicianos de la Yamaa Islamiya, un grupo islamista libanés que ha lanzado proyectiles contra Israel como represalia por la masacre israelí en Gaza.
Los militares israelíes aseguran que "terroristas armados" dispararon contra sus soldados, y que estos respondieron con fuego y apoyo aéreo. Seis soldados han resultado heridos, tres de ellos graves, según la versión israelí.
Ocupación israelí en Siria
Tras la caída del régimen de Bachar al Asad hace un año, tropas israelíes invadieron la zona desmilitarizada de los Altos del Golán y el lado sirio del monte Hermón, ocupando varias localidades donde todavía mantiene posiciones con la excusa de proteger su seguridad y "defender" a la minoría drusa siria.
Además, Israel bombardea a menudo el territorio sirio, como hizo este verano en repetidas ocasiones cuando decidió intervenir en favor de los drusos durante enfrentamientos internos en el sur de Siria. Sin embargo, en los últimos meses se han producido sobre todo incursiones terrestres en suelo sirio, a veces tan al norte como las afueras de Damasco.
