El huracán Melissa toca tierra en Cuba tras pasar por Jamaica y deja 23 muertos en Haití
- Las autoridades de Haití han reportado además 17 heridos y 13 desaparecidos
- Hay más de 500.000 jamaicanos afectados y otros tantos sufren cortes de electricidad
El huracán Melissa, con categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, ha tocado tierra en la costa sur del oriente de Cuba en la madrugada de este miércoles acompañado de fuertes vientos, intensas lluvias y una gran marejada ciclónica.
Llega tras su paso por la isla de Jamaica, donde ha impactado como un ciclón de categoría 5. Las autoridades jamaicanas han informado este miércoles de cuatro fallecidos a causa del huracán. "Me entristece anunciar que la policía de St. Elizabeth confirmó el fallecimiento de cuatro personas: tres hombres y una mujer. Sus cuerpos fueron encontrados arrastrados por las inundaciones provocadas por el huracán", ha declarado el ministro de Gobierno Local y Desarrollo Comunitario de Jamaica, Desmond McKenzie, en un comunicado de prensa.
Kingston ha señalado que toda la isla ha sufrido el impacto de Melissa, que ha dejado a más de medio millón de personas sin luz. El ministro responsable de la respuesta ante desastres ha asegurado que hay más de 500.000 jamaicanos afectados. Sin embargo, no ha podido ofrecer detalles concretos sobre la magnitud de los daños, ya que todavía se están recabando datos, pero sí que ha reportado inundaciones generalizadas, deslizamientos de tierra y graves daños en las infraestructuras.
Desde el Reino Unido, el Gobierno financiará hasta tres millones de dólares a través del programa de financiación para Jamaica para favorecer una respuesta humanitaria rápida, incluyendo la entrega de suministros de emergencia como kits de refugio, filtros de agua y mantas.
El primer ministro, Andrew Holness, ha declarado Jamaica como "zona catastrófica" y ha informado de que unas 15.000 personas siguen alojadas en refugios. El mandatario ha asegurado que el Gobierno no había recibido ninguna confirmación de fallecimientos, pero dada la fuerza del huracán y la magnitud de los daños, han previsto "que habrá algunas pérdidas de vidas". La víspera, cuando la isla se preparaba para la llegada del Melissa, al menos tres personas murieron en una tala de árboles.
En Haití, las autoridades han reportado 23 muertes, 17 heridos y 13 desaparecidos tras el paso de Melissa por la isla el 23 de octubre y han informado que las muertes se han producido principalmente por las inundaciones en Petit-Goave, donde al menos 10 niños han muerto y 10 personas permanecen desaparecidas.
Cuba, preparada para el impacto de Melissa
Cuba se ha preparado para la llegada de Melissa. Su presidente, Miguel Díaz-Canel, ha alertado a la población de la magnitud y el riesgo del huracán. "Pedimos que, una vez más, aprovechando las horas que nos quedan para el paso, toda nuestra población esté ubicada en zona segura", ha señalado en declaraciones televisadas.
El mandatario ha asegurado que ya hay brigadas preparadas para trabajar en la recuperación de los daños que provoque este huracán. Las autoridades han advertido del riesgo para la vida por los efectos de la tormenta, con probabilidad de inundaciones súbitas, penetraciones del mar en zonas bajas costeras, derrumbes e, incluso, roturas de presas.
En las Bahamas, siguiente destino de Melissa, el Gobierno ha ordenado la evacuación de los residentes en la zona sur del archipiélago. Más al este, en la isla de La Española, donde cohabitan Haití y República Dominicana, llevan sintiendo los efectos de Melissa desde el pasado 23 de octubre.
Efectos del cambio climático
Si bien Jamaica está acostumbrada a los huracanes, nunca antes había sufrido el impacto directo de una tormenta de categoría 4 o 5. Meteorólogos de AccuWeather han señalado que Melissa se posiciona como el tercer huracán más intenso observado en el Caribe, después de Wilma en 2005 y Gilbert en 1988, la última gran tormenta que tocó tierra en Jamaica.
La comunidad científica advierte que las tormentas se intensificarán con mayor rapidez y frecuencia debido al calentamiento de las aguas oceánicas. Por ello, muchos líderes caribeños han pedido a las naciones ricas y altamente contaminantes que ofrezcan reparaciones o alivio de la deuda a los países insulares tropicales que sufren las consecuencias.