Desesperación entre las personas atrapadas en Gaza: "No sabemos qué más hacer ni a quién más pedir ayuda"
- Las condiciones por los bombardeos y la hambruna en la Franja empeoran con la ofensiva terrestre en la capital
- El nicaragüense Samer Alwariz y el gazatí Atta Al-Akhras cuentan a RNE que no pueden salir de allí
El portavoz de las Fuerzas Armadas israelíes ha reconocido este miércoles que tomar el control total de la ciudad de Gaza les llevará meses, pero eso no les impedirá continuar con sus planes. Mientras tanto, la población gazatí continúa sobreviviendo a los constantes bombardeos y a la hambruna.
En 'Las Mañanas de RNE' viajamos hasta el interior de la Franja de Gaza para conocer la historia de Samer Alwariz, un palestino nicaragüense que se encuentra en el norte de Gaza con su familia y su hijo de 9 meses.
El nicaragüense ha especificado que se encuentra en el norte de la Franja, "la zona que está siendo desplazada", y ha contado la triste y angustiosa realidad que viven en ese punto del planeta en estos momentos: "La situación está cada día peor, más desde ayer que empezaron los ataques terrestres".
Añade en una entrevista en las Mañanas de RNE que el apartamento en el que vive con su familia "sigue medianamente intacto". Se ha visto afectado durante la guerra, pero todavía hay cuatro paredes". Alwariz y su familia han tratado de salir de Gaza. "No hemos podido", reconoce. Como cuenta con la nacionalidad nicaragüense, ha solicitado a las autoridades del país que los saquen de Gaza, aunque ha admitido que "hasta el momento no ha sido posible".
Desde que comenzó la ofensiva israelí en Gaza, Samer Alwariz y su familia se han desplazado por el norte de la Franja unas 15 veces: "Lamentablemente, así es como hemos tenido que estar viviendo", ha relatado.
"Mi padre es palestino, abrimos un negocio, pero lamentablemente lo quemaron". Tras la pérdida de su negocio, el entrevistado ha señalado que desde ese momento "las condiciones han sido catastróficas" y, por último, ha expresado: "No sabemos qué más hacer ni a quién más pedir ayuda".
"Esto es una pesadilla"
Parecido es el relato de Atta Al-Akhras, un gazatí que estuvo durante un tiempo en España ganándose la vida hasta que en 2023 tuvo que volver a la Franja de Gaza para ayudar a su familia.
Allí se quedó atrapado. Ha perdido gran parte de su familia en un ataque israelí. "Esto es una pesadilla", ha dicho en el programa 'El último tren' de RNE, donde ha contado cómo es su día a día. Destaca que en ningún sitio se sienten seguros, aunque ahora mismo el peor lugar en el que estar es la ciudad de Gaza.
Invasión israelí de la capital
Israel continúa con su ofensiva terrestre en ciudad de Gaza. A los constantes bombardeos israelíes y el avance de los tanques por las angostas calles de la capital, se suma el éxodo masivo de las miles de personas que intentan huir hacia sur del enclave.
En las últimas horas, el Ejército hebreo ha asesinado a un centenar de palestinos, que se suman a las más de 65.000 de víctimas que deja este conflicto. Mientras, los equipos de rescate trabajan sin descanso y los pocos hospitales que se mantienen en pie operan completamente desbordados.
Durante la madrugada de este martes, los blindados han penetrado el núcleo urbano y ya avanzan hacia el centro de la ciudad. De momento, 350.000 personas han huido de la urbe, intentando zafarse de una muerte segura.
A sus espaldas queda la humareda de los constantes bombardeos y unos 600.000 vecinos que no han tenido más remedio que quedarse. Hay pocos vehículos y desplazarse a pie es prácticamente imposible para los niños, mayores y personas dependientes. El éxodo corresponde 40% de la población total de la capital, que antes del 7 de octubre contaba con un millón de habitantes.
RNE