El Guadiana, otro río del narco: desarticulada una de las mayores redes criminales dedicada al tráfico de cocaína
- La Policía Nacional ha detenido a 18 personas, si bien el líder está todavía en paradero desconocido
- Durante la operación, se ha arrestado a un agente de policía local, acusado de filtrar información a la red
Era de madrugada cuando más de 250 agentes de la Policía Nacional se desplegaron en un operativo sincronizado en seis provincias españolas. Ejecutaron una acción que llevaba meses gestándose y caía así una de las redes criminales más complejas y poderosas dedicada a introducir cocaína a través de la frontera líquida entre España y Portugal, el río Guadiana.
La red, compuesta por dos organizaciones complementarias, utilizaba embarcaciones semirrígidas —lanchas rápidas con casco rígido y bordes inflables— para introducir la droga a través del río desde su desembocadura y contaba con un entramado financiero diseñado para blanquear millones de euros a través de negocios legales, obras de arte y activos de lujo.
La operación, llevada a cabo el 20 de mayo bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción n.º 6 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía Antidroga, culminó con la detención de 18 personas, 27 registros y la incautación de diverso material: armas de fuego, visores nocturnos, inhibidores de frecuencia, criptosistemas avanzados y una radio oculta en una nevera portátil para comunicarse desde embarcaciones en alta mar.
Imagen de parte del material incautado LUCÍA GONZÁLEZ
Delito externalizado: el narco que contrataba a otros narcos
El Guadiana se convirtió en el eje logístico de la red para introducir grandes cantidades de cocaína mediante embarcaciones semirrígidas de alta velocidad. Pero lo realmente insólito fue el modelo operativo: una organización criminal subcontrataba a otra banda local para ejecutar el transporte marítimo de la cocaína.
"Estamos ante una organización de alcance supranacional, cuyo principal responsable aún está en paradero desconocido", ha explicado el comisario y jefe de la Brigada Central de Estupefacientes, Alberto Morales. "Nunca habíamos visto una externalización criminal tan estructurada en España".
Según fuentes policiales, la organización había convertido una finca en Lepe (Huelva) en su base de operaciones. Allí almacenaban embarcaciones, coches sustraídos y material de vigilancia para proteger los movimientos. A través del río Guadiana, la cocaína llegaba a Andalucía antes de distribuirse a distintos puntos del país y del extranjero.
La red operaba en función de sus propios intereses, y utilizaba distintos puntos de entrada según la presión policial. Ayamonte, Isla Cristina y Lepe eran algunas de las zonas más utilizadas, por su acceso fluvial y discreción.
Millones de euros lavados en arte y criptomonedas
Aunque la logística operativa se centraba en el suroeste de España, algunas pistas financieras también conducían hasta Emiratos Árabes Unidos. La Policía Nacional detectó una compleja red de sociedades utilizadas para introducir en el circuito legal los beneficios del tráfico de droga.
"Crearon sociedades mercantiles con capital inflado", ha detallado Daniel Vázquez, inspector jefe de la Brigada de Blanqueo de Capitales. Vázquez ha matizado que lo que más les llamó la atención fue la aportación de obras de arte en la constitución de sociedades, una práctica que no es habitual.
Entre los activos incautados, se encuentran bienes inmuebles valorados en más de 3,5 millones de euros y cuadros atribuidos a artistas como Picasso, cuya tasación aún está siendo verificada.
La investigación reveló que han circulado más de 7 millones de euros sin ser detectados por los sistemas de prevención contra el blanqueo de capitales, lo que, según los agentes, “es un ejemplo más del nivel de sofisticación que usa el crimen organizado”.
Además, utilizaban criptoactivos gestionados a través de un sistema de encriptación "muy sofisticado que se desconocía", en palabras del inspector jefe Vázquez.
Narcoempresarios: cuando el crimen imita al capitalismo
El blanqueo no se limitaba a estructuras opacas en el extranjero. En el corazón del entramado estaban negocios perfectamente visibles: cafeterías, solariums, restaurantes y concesionarios de vehículos de lujo, sobre todo en Sevilla y Huelva.
"La operativa en concesionarios, sociedades y compras de inmuebles ha sido mucho más compleja que en otras ocasiones por la sofisticación en todos los medios y medidas de seguridad", ha reconocido el inspector jefe de la unidad de blanqueo.
A través de estas actividades, la organización logró bancarizar al menos 2,5 millones de euros y camufló adquisiciones por más de 11 millones en inmuebles, coches de alta gama y embarcaciones.
La Policía Nacional ha bloqueado 70 cuentas bancarias y activos por valor de más de 10 millones de euros. Los investigadores destacan que esta intervención financiera fue tan decisiva como la intervención de la droga.
Corrupción y alta tecnología
Uno de los aspectos más delicados de la operación fue la detención de un agente de policía local, acusado de filtrar información a la red. En los registros también se hallaron matrículas robadas, coches de alta gama y una bombona de butano manipulada con un doble fondo para ocultar droga o dinero.
El líder de la organización, en busca y captura, ya fue condenado en 2017 por traficar con 2.500 kilos de hachís. Se le vincula ahora con la entrada de 1.600 kilos de droga en Huelva y 110 fajos de cocaína en la Península el pasado enero.
"Esta operación tiene una dimensión histórica no solo por la cantidad de droga y dinero, sino por la estructura empresarial y tecnológica que la sostenía", destacó José Rodríguez, comisario de la UDEF.
Golpe a la economía del crimen
Desde el Complejo Policial de Canillas, en Madrid, se estableció un centro de mando multifuncional que permitió seguir en directo cada uno de los 27 registros practicados en Málaga, Marbella, Huelva, Sevilla, Cádiz y Asturias. El despliegue, sin precedentes, permitió actuar de forma simultánea y supervisada por la propia autoridad judicial, que estuvo presente durante la ejecución.
"La incautación de droga es solo una parte. Lo crucial es neutralizar su capacidad económica. Si no estrangulamos el flujo financiero, estas redes siempre encuentran la forma de renacer", ha sentenciado Rodríguez.
Cuatro de los detenidos ya han ingresado en prisión provisional, en una operación que amplía el mapa del narcotráfico en España. El Guadiana —convertido en arteria de entrada y ruta de escape— ha vuelto a ser el escenario de una batalla silenciosa contra un crimen organizado que se reinventa para sobrevivir.