Derechos Sociales asume la tutela de los menores encerrados en Oviedo y sus padres ingresan en prisión provisional
- Los niños vivían en "la casa de los horrores", sin escolarizar y rodeados de basura y excrementos
- La detención de los padres, que han ingresado en la cárcel, se produjo el pasado lunes en la vivienda
La Dirección General de Infancia y Familias del Principado de Asturias ha asumido la custodia de los tres menores encontrados en estado de abandono y encerrados en su vivienda, presuntamente por sus padres, en Fitoria, Oviedo. La pareja detenida el pasado lunes por mantener durante cuatro años a los menores, dos gemelos de 8 años y otro niño de 10, en condiciones insalubres, ha pasado a disposición judicial.
El matrimonio, un hombre alemán de 53 años y una mujer de 48 con doble nacionalidad alemana y estadounidense, prestó declaración policial el martes con ayuda de un traductor. Ambos se encontraban en dependencias de la Guardia Civil y han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo sobre las 11.30 horas de este miércoles. La investigación comenzó el 14 de abril y el titular del Juzgado ha decidido este miércoles enviarlos a prisión provisional sin fianza en el Centro Penitenciario de Asturias. La toma de declaración se ha retrasado más de lo previsto, por el retraso del intérprete.
Los dos detenidos llegaron a las 11.30 horas al juzgado, pero a las 13.43 continuaban sin un traductor alemán, el único idioma en el que se comunica la pareja. Los abogados, que aún no habían tenido contacto con la pareja a falta del intérprete, también se encontraban en las dependencias judiciales, aunque no han querido declarar ante los periodistas. Con la llegada del traductor, se han retomado los trámites procesales correspondientes. La pareja está acusada de violencia doméstica, maltrato habitual psicológico y abandono de menores. También, se podría haber producido un delito de detención de menores.
La familia vivía de alquiler desde 2021 en un chalet en la zona rural de Oviedo, donde estuvieron encerrados los niños, sin escolarizar. Cuando los agentes llegaron a la vivienda el pasado lunes, encontraron a los menores con mascarillas y pañales rodeados de basura y desperdicios, según ha señalado el comisario principal de la Policía Local de Oviedo, Francisco Javier Lozano, que considera que existen "indicios suficientes de criminalidad" en la llamada "casa de los horrores". Los gemelos dormían en cunas de bebé y el mayor en una cama demasiado pequeña para su edad.
Denuncia vecinal
Una vecina alertó a la sección de Familia e Infancia del Ayuntamiento de que nunca veía salir al jardín ni al exterior de la vivienda a los niños, lo que le hacía pensar que tampoco iban al colegio. Desde entonces, comenzó una "discreta vigilancia" y una investigación que determinó que una sola persona se había empadronado en la casa en febrero de 2022.
Los agentes pudieron comprobar que no había movimiento, las persianas estaban bajadas y el censado en la vivienda únicamente salía a la puerta para recoger pedidos de supermercados. Su volumen levantó sospechas de los investigadores, porque eran excesivos para consumo de una única persona, lo que les hizo sospechar que había más residentes.
A las 11.15 horas del lunes comenzó el operativo, tras los indicios recogidos y testimonios recabados a lo largo de dos semanas, que se vio afectado por el apagón y les "obligó a hacer la tarea casi a oscuras", sin acceso a bases de datos y con las comunicaciones limitadas.
Incógnitas de la investigación
Según ha explicado el comisario, no les consta que no pagasen el alquiler y tampoco a qué se dedicaban laboralmente los progenitores. Se desconoce también qué les motivó a mudarse a la zona y "qué ha llevado a una familia a estar largo tiempo encerrada". Todos los miembros portaban mascarillas y en el interior de la vivienda también se encontraron medicamentos. El impacto de la pandemia puede estar detrás de estas decisiones, aunque no hay certezas.
La investigación tampoco ha explicado por el momento cómo pasaban los niños, que se comunicaban en inglés, el encierro, ni si recibían educación en la vivienda, "cuyas condiciones no eran las normales para cualquier convivencia común familiar" y podía "poner en riesgo" su salud.
Los niños ya están en un entorno seguro
La consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Marta del Arco, ha señalado que los menores se encuentran en régimen de acogimiento residencial en un centro dependiente de la Consejería, donde "se les está garantizando su mayor bienestar". Del Arco ha destacado que todavía "es muy pronto" para determinar las secuelas de los niños, que se encuentran en "un proceso de valoración inicial en los ámbitos físico, psicológico, social y relacional".
Ha añadido que la detección de este caso es crucial, puesto que "después de todos los esfuerzos realizados para visibilizar la violencia contra la infancia, tanto por acción como por omisión" se ha podido identificar el maltrato de los niños y "ofrecerles las experiencias de vida que merecen, como el resto de menores de nuestro país". A partir de ahora, les espera "un tiempo de adaptación en el centro", antes de profundizar en su valoración, tras haber vivido en situación de desprotección, rodeados de animales enfermos y excrementos.