La OTAN señala que España ocupa la última posición de gasto militar en 2024, con un 1,24% del PIB
- La cifra es previa al anuncio del Gobierno de Sánchez de un gasto adicional en Defensa de 10.471 millones de euros
- Según datos del Ministerio de Defensa, el porcentaje actual ronda el 1,43%.


España ha vuelto a ocupar en 2024 la última posición como el país de la OTAN que menos invirtió en defensa, con solo el 1,24% de su PIB, según el informe anual de la Alianza publicado el jueves. El dato, aunque provisional y previo al anuncio esta semana del Gobierno de Pedro Sánchez de una inyección adicional de 10.471 millones de euros para alcanzar el 2% este 2025, sitúa al país por detrás de socios como Eslovenia, Luxemburgo o Bélgica. Según cifras del Ministerio de Defensa, el porcentaje actual ronda el 1,43%.
El informe, presentado por el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, revela que los aliados europeos y Canadá incrementaron su gasto militar un 19,4% en 2024, superando por primera vez el 2% de media (frente al 1,74% de 2023). Un total de 22 de los 31 miembros han alcanzado o rebasado ese umbral, con Polonia (4,07%), Estonia (3,41%) y Estados Unidos (3,19%) a la cabeza.
Como respuesta, Defensa ha emitido un comunicado en el que se ha comprometido a alcanzar el 2% en 2025, "tal y como consta en el plan de Seguridad y Defensa presentado el martes". Además, Sánchez comparecerá el próximo 7 de mayo ante el Pleno del Congreso para informar del plan de aumento, según ha podido confirmar RNE.
España, sin embargo, sigue entre los nueve países que no han cumplido el objetivo pactado en 2014. Aunque mejoró ligeramente respecto al 1,16% de 2023, su inversión absoluta (17.243 millones de euros) queda lejos de las potencias aliadas.
A este respecto, Rutte ha subrayado que Europa y Canadá han sumado 700.000 millones de dólares extra en defensa en la última década pero ha recordado la necesidad de "acelerar radicalmente estos esfuerzos en 2025".
Elevar el gasto al 3% como próximo objetivo
La OTAN debate ya elevar la meta mínima al 3 o 3,5% del PIB, ante las exigencias de EE.UU. y la guerra en Ucrania. En este contexto, Sánchez adelantó el martes su plan para alcanzar el 2% en 2025 —cuatro años antes de lo previsto—, con una partida adicional que incluye modernización de equipos y proyectos industriales.
Pese a su bajo porcentaje, España sí superó el objetivo de destinar al menos 20% del gasto militar a equipamiento, llegando al 30,3%. Además, Rutte ha informado que Europa y Canadá aportaron el 60% de los 55.000 millones de dólares en ayuda militar a Ucrania en 2024.
La presión seguirá en junio, cuando los líderes de la OTAN se reúnan en los Países Bajos para fijar un nuevo techo de gasto. Mientras países como Polonia ya superan incluso el nuevo límite previsto, España deberá demostrar que su acelerón no es solo coyuntural.