Enlaces accesibilidad
Análisis

Trump y Zelenski: Sin título

Bronca entre Trump y Zelenski en la Casa Blanca
El presidente de Estados Unidos se dirige amenazante al presidente de Ucrania en su reunión este viernes REUTERS/Brian Snyder
ANNA BOSCH

En arte es habitual encontrar junto a un cuadro la cartela "sin título", el autor no le pone título a su obra y deja que sea el espectador del cuadro quien lo interprete libremente. Así me siento yo después de ver la rueda de prensa en el Despacho Oval de la Casa Blanca entre el anfitrión, el presidente Donald Tump, y el invitado, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. ¿Qué decir? ¿Cómo titular semejante espectáculo? Porque que Putin habita en el Despacho Oval ya lo usé la semana pasada.

Cómo calificar que el presidente ucraniano le tenga que recordar una y otra vez a su anfitrión, el gobierno de los Estados Unidos, que fue Rusia quien invadió Ucrania hace tres años y desencadenó una guerra total, y no al revés. Cómo calificar que el "líder del mundo libre", como suele calificarse a cualquier presidente estadounidense, se posicione en un punto equidistante entre el invasor y el invadido, y le reproche al invadido su odio al invasor.

Cómo calificar que el presidente de la primera potencia de Occidente, de una hasta ahora democracia liberal, se mofe del presidente que no huyó, como imaginaba la mayoría e hicieron algunos de sus antecesores, y se quedó en Ucrania bajo las bombas. Se mofa porque Zelenski no se fía del presidente ruso, Vladímir Putin, no se fía de que respete un alto el fuego, si detrás no hay una amenaza que tema en caso de que no lo haga. Cómo calificar el berrinche público de Trump y su vicepresidente JD Vance porque consideran que Zelenski no es suficientemente agradecido, no con los EE. UU., que lo es y mucho Zelenski, sino con Donald Trump. Cómo calificar, no ya el atropello a la diplomacia más básica, sino a una mínima empatía con alguien que lleva tres años bajo las bombas y viendo morir y sufrir a miles de conciudadanos.

Cómo calificar que después de lo que vimos sea Trump quien acuse a Zelenski, por corregirle o por recordarle algunos datos, de faltarle al respeto.

Testimonios de peso

Como no tengo calificativos, o se me ocurren demasiados, voy con los comentarios de personas que han tenido puestos de responsabilidad con gobiernos republicanos, incluso, en el gobierno de la primera presidencia Trump:

John Bolton es del ala dura, se hizo famoso hace unos veinte años por despreciar la ONU hasta el punto de decir "si dinamitaran diez pisos, no se notaría". Bolton fue consejero de Seguridad en la primera presidencia Trump, y lo ve así: "Trump y Vance han declarado estar del lado de Rusia en esta guerra. Es un error catastrófico para la seguridad nacional de los EE.UU. Y seamos claros, es la política de Trump y Vance, no es la posición de la mayoría de los estadounidenses".

David Frum escribió discursos para el presidente George W. Bush y entre sus creaciones está la del "eje del mal". De ser un asesor de Bush a ser uno de los mayores críticos de Trump, ha escrito después del espectáculo y de que Zelenski se fuera de la Casa Blanca sin firmar el acuerdo sobre tierras raras y sin la segunda rueda de prensa prevista: "No, la reunión no ha ido mal para Ucrania. Ha expuesto de la manera más innegable e inequívoca los compromisos pro-Putin del presidente y el vicepresidente. Es una información que los estadounidenses y sus aliados necesitaban tener clara." Y ha retuiteado este comentario: "Somos un país completamente diferente del que éramos hace dos meses. Abusón. Agresor. Palmero de Putin. Traidor de aliados. Maleducado. Crudo. Deshonesto."

A este lado del Atlántico

La responsable de Exteriores de la Unión Europea, Kaja Kallas, exprimera ministra estonia, conservadora, pro atlántica hasta hoy, la más dura en el seno de la UE frente a Putin ha tuiteado: "Hoy ha quedado claro que el mundo libre necesita a un nuevo líder. Le toca a Europa aceptar este reto".

Y en Moscú un articulista de Komsomolskaya Pravda, afín al Kremlin, no puede reprimir su regocijo y escribe jocosamente "La fachada del salvador de Europa se derrumbó rápidamente bajo el huracán de los argumentos de Trump, que fue dando en el clavo, diciendo las cosas como son. La cara confusa del favorito de los líderes occidentales fue perdiendo su brillo. Por primera vez a Zelesnki le dijeron a la cara qué eslabón ocupa en la cadena alimentaria".