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El Tribunal Supremo de Israel anula la controvertida ley de Netanyahu que limitaba la supervisión judicial

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Netanyahu, contra las cuerdas despues de que el Tribunal Supremo tumbase su reforma de la justicia

El Tribunal Supremo israelí ha anulado este lunes en una ajustada votación la Ley Básica Judicial, la norma más importante aprobada en el marco de la polémica reforma judicial que impulsó el Gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu que restaba parte del poder del alto tribunal y desató protestas en todo el país.

Es la primera vez en la historia de Israel que un tribunal anula una ley básica, con nivel cuasiconstitucional.

El Supremo ha aprobado por ocho votos contra siete esta norma y ha respaldado con el voto de doce magistrados la capacidad de los tribunales de revisar las leyes aprobadas por el Parlamento, incluidas las leyes básicas como la que en julio derogó la conocida como Ley de Causa Probable, según recoge la prensa israelí.

Competencias para intervenir y anular normas

Los tribunales conservan así sus competencias para intervenir y anular de forma excepcional y en casos extremos normas en las que la Knesset o Parlamento se exceda en su autoridad.

La Ley Básica Judicial fue aprobada el 24 de julio. Estas leyes básicas están consideradas como capítulos de una futura Constitución de Israel.

Esta reforma judicial ha sido el motivo de meses de movilizaciones contra el Gobierno de Netayahu, al que la oposición acusa de totalitarismo y de atentar contra la división de poderes al intentar reducir el alcance de la ley de razonabilidad al nivel administrativo y dejar fuera el nivel de cargos electos. Incluso la fiscal general israelí, Gali Baharav Miara, ha manifestado su rechazo a la norma ahora derogada. También el ministro de justicia israelí acusa a la Corte Suprema de "atribuirse todos los poderes".

Por su parte, el partido Likud de Netanyahu ha confirmado que "la decisión del Tribunal Supremo se opone a la voluntad de unidad del pueblo, especialmente de guerra".

Las protestas solo han cesado tras los ataques del 7 de octubre de Hamás contra suelo israelí que se saldaron con unos 1.200 muertos y que han propiciado una operación militar de represalia contra la Franja de Gaza.