La oposición celebra la dimisión de Johnson, pero amenaza con una moción de censura si permanece hasta otoño

• La noticia ha llegado hasta el Kremlin, que ha recalcado que, al igual que a Johnson "no le gusta Rusia", "él a Moscú tampoco"
• Así te hemos contado la dimisión de Johnson

El líder del Partido Laborista, Keir Starmer

La dimisión del primer ministro británico, Boris Johnson, está dando la vuelta al mundo. Acorralado por el aluvión de renuncias en su Ejecutivo, Johnson ha anunciado su renuncia este jueves, una decisión que ha celebrado la oposición británica: "Debería haber ocurrido hace mucho tiempo", ha señalado el laborista Keir Starmer, quien a su vez ha amenazado con presentar una moción de censura si permanece en el cargo hasta otoño. La noticia ha llegado hasta el Kremlin, que ha recalcado que, al igual que al líder británico "no le gusta Rusia", "él a Moscú tampoco".

En los dos últimos días, más de 50 conservadores han presentado sus cartas de renuncia, entre ellos varios ministros que alegan que han perdido la confianza en Johnson. El motivo, el escándalo sexual en torno a un funcionario de Downing Street tras meses de tensión por el 'partygate', las fiestas celebradas en Downing Street en plena pandemia de coronavirus.

Los primeros en pronunciarse han sido los laboristas. Starmer ha dicho que es "una buena noticia" para el país, aunque "debería haber ocurrido hace mucho tiempo". Y ha considerado que el Reino Unido "no necesita cambiar al 'tory' en el poder", sino un "cambio de gobierno completo". "Johnson siempre ha sido inadecuado para el cargo. Ha sido responsable de mentiras, escándalos y fraude a una escala industrial. Y todos aquellos que han sido cómplices deberían estar totalmente avergonzados", ha afirmado el dirigente en una nota colgada en su cuenta de Twitter.

El líder laborista ha amenazado incluso con presentar una moción de censura en los próximos días, en caso de que Johnson permanezca en el cargo hasta la celebración del congreso 'tory' en octubre. "Si no se deshacen de él, entonces los laboristas defenderán el interés nacional y darán un voto de censura porque no podemos continuar con este primer ministro aferrándose durante meses y meses", ha anunciado.

A la espera de elegir al nuevo líder conservador, un proceso que llevará varias semanas, Johnson ha iniciado la designación de los ministros que componen el nuevo Ejecutivo interino, a fin de que no haya un vacío de poder en el Reino Unido. Políticos 'tories' como la fiscal general Suella Braverman o el diputado Steve Baker se han postulado ya públicamente como candidatos, mientras que otros pesos pesados del Gobierno suenan desde hace meses como posibles aspirantes.

Otros líderes reclaman elecciones generales

También se ha mostrado muy crítica la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, quien ha recalcado que, a pesar del "alivio" que supone la dimisión, "el déficit democrático inherente a Westminster no se soluciona con un cambio de primer ministro". "Es una figura de absoluto descrédito. Cualquiera que intente sabotear nuestros acuerdos de paz, un cuarto de siglo de progreso y nuestro futuro compartido no es realmente amigo nuestro”, ha afirmado la líder del Sinn Féin en Irlanda del Norte, Michelle O'Neill.

Y desde Gales, el ministro principal, Mark Drakeford, se ha declarado "encantado" de que el "premier" haya tomado "la decisión correcta" de abandonar el Ejecutivo, al tiempo que ha pedido unas elecciones generales para sustituirlo.

Mientras que algunas voces de su propio partido han dicho que Johson ha tomado "la decisión correcta". "Necesitamos calma y unidad ahora y seguir gobernando mientras se encuentra un nuevo líder", ha puntualizado la ministra de Exteriores, Liz Truss, que pertenece al considerado "ala dura" de los conservadores. Precisamente su nombre lleva tiempo sonando como una de las posibles candidatas favoritas de las bases 'tories' para un eventual relevo de poder.

Las reacciones a la dimisión de Johnson fuera del Reino Unido

Las reacciones van más allá de las islas británicas. Desde el Kremlin han asegurado este jueves que los informes de que Johnson renunciaría en breve como primer ministro le preocupaban poco. "A él (Johnson) no le gustamos, no nos gusta él tampoco", ha aseverado su portavoz, Dmitry Peskov, para después declarar que espera que "algún día" al Gobierno británico lleguen políticos que entiendan "la conveniencia de resolver los problemas a través del diálogo".

También desde Ucrania se han pronunciado al respecto. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha hablado con Boris Johnson a través de una llamada telefónica en la que le ha expresado su agradecimiento por el apoyo a su país desde los primeros días de la invasión rusa. Además, el mandatario ha recalcado que no duda que el apoyo de Reino Unido seguirá tras la dimisión de Johnson.

El asesor presidencial, Mykhailo Podolyak, ha agradecido a Johnson su liderazgo al "asumir la responsabilidad en los momentos más difíciles" y "ser el primero en llegar a Kiev, a pesar de los ataques con misiles". "Gracias por darte cuenta de la amenaza del monstruo de Rusia y estar siempre al frente para apoyar a Ucrania", ha expresado a través de un mensaje en su cuenta de Twitter.

También han llegado reaccions desde Estados Unidos. El presidente estadounidense, Joe Biden, ha prometido seguir trabajando con el Reino Unido tras la salida de Johnson porque el país es su "amigo y aliado más cercano.

"La relación especial entre nuestros pueblos sigue siendo fuerte y duradera. Espero seguir estrechando nuestra cooperación con el Gobierno del Reino Unido", ha dicho Biden en un breve comunicado.

Por su parte, el negociador de la Unión Europea para el Brexit, Michael Barnier, ha señalado que la salida de Johnson "abre una nueva página en las relaciones con Reino Unido" y ha pedido que sea "más constructiva, más respetuoso de los compromisos asumidos, en particular con respecto a la paz y la estabilidad en Irlanda del Norte, y más amigable con los socios en la UE" pues, a su juicio, "hay mucho más por hacer juntos".

La Comisión Europea ha evitado pronunciarse sobre la dimisión, aunque ha asegurado que desde Bruselas se seguirá tratando de buscar soluciones sobre la implantación del protocolo de Irlanda del Norte.

"Sobre los acontecimientos en el Reino Unido como tales, no tenemos comentarios. No comentamos los procesos democráticos en países terceros, tampoco en los Estados miembros", ha declarado el portavoz de la CE Johannes Bahrke. "Nuestra posición es la de buscar soluciones sobre la implementación del protocolo y eso es todo. No cambia", ha añadido.

Johnson ha estado al cargo del Partido Conservador casi tres años, después de la salida de Theresa May. Si se formaliza su renuncia, sería una de las estancias más cortas en Downing Street desde 1900. En este tiempo, el primer ministro ha logrado desbloquear el divorcio de Reino Unido y la Unión Europea, pero también tuvo que hacer frente a la pandemia del coronavirus y a las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania.