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La justicia europea considera ilegal la ley húngara que penaliza la asistencia a demandantes de asilo

  • Deberán ahora ajustarse a lo dispuesto en la sentencia a la mayor brevedad posible o la Comisión podrá interponer otro recurso
  • Desde Hungría sostienen que "harán valer la voluntad" de los húngaros frente a las "ONG que fomentan la inmigración"

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Entrada principal del Tribunal de Justicia de la Unión Europea
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La Gran Sala del Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha dictaminado que Hungría viola la normativa comunitaria en materia de acogida de migrantes por sancionar, incluso hasta con penas de cárcel, a organizaciones que asisten a demandantes de asilo en la tramitación de sus solicitudes de protección internacional cuando llegan a territorio húngaro.

La tipificación penal de esta actividad menoscaba el ejercicio de los derechos garantizados por el legislador de la Unión en materia de asistencia a los solicitantes de protección internacional, según la Corte con sede en Luxemburgo.

La Justicia europea decide así sobre la denuncia que la Comisión Europea interpuso por la controvertida ley promovida en 2018 por el Gobierno de Viktor Orban, gracias a la cual se aumentaban los supuestos por los que se podía declarar inadmisible una solicitud de asilo y se tipificaba como delito la asistencia de organizaciones a estos migrantes. Estableció también restricciones a la libertad de circulación para las personas sospechosas de haber cometido este delito.

En concreto, el Tribunal ve contrario al derecho europeo que la ley húngara permita denegar una petición de asilo porque el solicitante llegara a su territorio desde un país en el que no estuviera expuesto a persecución ni a riesgo de daños graves, dado que esta opción no figura en ninguna de las situaciones de inadmisibilidad que sí prevé la directiva comunitaria.

La sentencia explica, además, que al sancionar a quien asiste al migrante en determinados supuestos se priva al solicitante en una fase muy previa del proceso de la asistencia que le permitiría impugnar más tarde la regularidad de la normativa nacional.

Ahora, Hungría deberá ajustarse a lo dispuesto en la sentencia con la mayor brevedad posible, si no lo hace la Comisión puede interponer un nuevo recurso ante el Tribunal solicitando que se le impongan sanciones pecuniarias.

El Gobierno sostiene que "hará valer la voluntad de los húngaros"

El Gobierno húngaro ha respondido a la sentencia y ha indicado que respeta la condena de la Justicia europea, pero ha advertido de que "hará valer la voluntad" de los húngaros frente a las "ONG financiadas desde el extranjero que fomentan la inmigración".

"Mientras haya en Hungría un Gobierno nacional, este hará valer la voluntad de los húngaros e impedirá que Hungría sea un país de inmigración", ha asegurado en Facebook el secretario de Estado de Comunicación Internacional, Zoltan Kovacs.

El Comité Helsinki Húngaro, cuyo objetivo es verificar si la legislación húngara garantiza los derechos humanos, ha celebrado un fallo que garantiza que las ONG puedan hacer su labor "sin ser amenazados de ser encarcelados".

Con todo, Márta Pardavi, copresidenta de esa ONG, ha expresado su esperanza de que "el Gobierno no quiera sabotear el fallo de la TJUE, como lo ha hecho en otras ocasiones".

Por su parte, Amnistía Internacional ha aplaudido que "la Unión Europea no tolere la campaña intimidatoria del Gobierno húngaro frente a aquellos que opinan que todos deben tener acceso a los derechos humanos".