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Financiación autonómica

Montoro estudiará la reestructuración de deuda de las comunidades infrafinanciadas

  • Es "el momento" de reformar el sistema de financiación autonómica "pronto"
  • Propone simplificar el modelo actual para proteger sanidad, educación y servicios
  • Sin un gobierno en Cataluña, dice, no se puede replantear la deuda autonómica

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El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, durante su comparecencia en el Congreso
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, durante su comparecencia en el Congreso

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado que es "el momento" de reformar el sistema de financiación autonómica, ante la mejoría de la recaudación y porque el déficit público está controlado. El ministro ha confiado en que "pronto" Cataluña "esté en condiciones" de participar en las negociaciones, ya que, sin su participación, para lo que necesita un gobierno, no se abordará el cambio, ha insistido.

Para ello, Montoro ha señalado que en el proceso de negociación se tendrá que estudiar si se suprimen algunos fondos y qué se hace con la deuda de las comunidades. "No hay ningún interés por parte del Estado de financiarse con esa deuda, que es entre administraciones", ha señalado el ministro ante la Comisión de Hacienda del Congreso.

En la comparecencia, fijada para hablar del sistema de financiación autonómica, Montoro ha explicado los avances de la reforma, que llevan un año en marcha con la participación de todos los gobiernos autonómicos salvo el catalán. El ministro ha asegurado que en 2018 las CCAA recibirán por el sistema de financiación 104.000 millones, la misma cantidad prácticamente de 2009 y 20.000 millones más que en 2011, lo que demuestra que "los ingresos no son ya un problema".

Simplificar el sistema actual de fondos

"Tenemos que ver qué hacemos con la deuda de las comunidades autónomas y, particularmente, qué hacemos con la deuda que las comunidades tienen contraída con el Estado", ha enfatizado Montoro, que ha precisado que igualmente será necesario estudiar qué parte de esa deuda se debe a la insuficiencia del sistema de financiación actual. Otra de las cuestiones "importantes" para la viabilidad del sistema es "qué hacer con los fondos" que tiene el modelo actual y que, en su opinión, es necesario simplificar.

Montoro ha insistido en que el sistema debe ser más sencillo que el actual, sin la sucesión de fondos que tiene el régimen de 2009 y que a su juicio crea agravios comparativos entre autonomías. Debe tener un fondo principal que sirva para asegurar la financiación de la educación, la sanidad y los servicios sociales según un coste efectivo y que quede protegido en caso de crisis económica, que no se resienta.

Según su criterio, se trataría de dotar al sistema de un auténtico fondo de garantía de financiación de servicios públicos que no cree agravios comparativos entre territorios y que esté financiado por los impuestos de los contribuyentes, con independencia de dónde se realice ese pago.

La revisión del modelo de financiación, solo posible con Cataluña

El ministro ha ratificado el compromiso del Gobierno con la revisión del sistema de financiación y ha pedido el apoyo de los grupos parlamentarios para que estén a la altura del desafío, que ha considerado "uno de los más urgentes y necesarios" que hay actualmente.

La reforma, según ha insistido, no se puede hacer sin representación de la Generalitat catalana, porque supondría la crítica permanente de que la revisión "se hizo sin ellos". "Eso no nos conviene", ha recalcado.

En su defensa de la revisión del modelo, Montoro ha dicho que el Gobierno es "razonablemente optimista" y se ha referido a los instrumentos aplicados hasta ahora para garantizar liquidez adicional, como el Fondo de Liquidez o el de Facilidad Financiera y que, en su opinión, deberán ir desapareciendo.

En conjunto, el ministro ha dibujado un escenario optimista para revisar el modelo y ha querido expresar públicamente el esfuerzo que hacen las comunidades autónomas para reducir el déficit. Además, ha aprovechado su comparecencia para referirse a los Presupuestos de 2018, para los que confía en que el Gobierno consiga una mayoría que permita su aprobación. En caso de no lograrlo, ha reconocido que habrá que recurrir "a los decretos de leyes correspondientes".