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Doble atentado en Cataluña

El imán de Ripoll pasó tres meses en una localidad belga conocida por sus yihadistas

  • La localidad belga de Vilvoorde fue conocida como "la ciudad de los yihadistas"
  • El municipio se ha convertido ahora en un referente tras su desradicalización
  • Abdelbaki Es Satty estuvo en la localidad entre enero y marzo de 2016
  • Especial: doble atentado en Cataluña

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El imán de Ripoll vivió tres meses en la localidad belga de Vilvoorde

Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll investigado en relación a la creación de la célula terrorista responsable del doble atentado en Cataluña, estuvo unos meses en Bélgica, concretamente en Vilvoorde, un municipio próximo a Bruselas, según ha confirmado a Efe el portavoz de la Fiscalía belga Thierry Werts.

El alcalde de la localidad, Hans Bonte, reveló este domingo que el clérigo estuvo en esa localidad situada en los alrededores de Bruselas entre enero y marzo de 2016 y que pudo haber viajado al país con anterioridad, según recogen medios locales belgas. Según Bonte, Satty estuvo en contacto con distintas mezquitas tratando de buscar trabajo.

Los Mossos investigan la vinculación del imán de Ripoll con la célula terrorista

Las autoridades españolas han contactado con la Fiscalía federal belga para obtener información sobre el clérigo musulmán según ha señalado Werts: "Puedo confirmar que se han llevado a cabo verificaciones a petición de las autoridades españolas. Este imán estuvo presente en Bélgica (...) Era totalmente desconocido para la Fiscalía federal", subrayó el portavoz, que declinó dar más detalles.

Un imán de Vilvoorde ha afirmado al diario El País que Abdelbaki Es Satty solicitó trabajo en Bélgica pero "desapareció" cuando le pidieron que acreditara que carecía de antecedentes penales. Es Satty no pudo satisfacer esta solicitud puesto que pasó cuatro años en la prisión de Castellón por tráfico de hachís, según han confirmado a Europa Press fuentes de la investigación.

Vilvoordee, el éxito de la desradicalización

Con un alto porcentaje de población musulmana, esta localidad belga fue conocida por la gran cantidad de yihadistas que salieron de ella para luchar en Siria, la mayor tasa del país.

"En Vilvoorde todo el mundo conoce a alguien que se ha ido", explicaba un joven del municipio a un equipo del programa Documentos TV, de TVE, hace un año y medio.

Este edificio de Ripoll, con varios pisos desocupados en su interior, centra ahora las miradas de la policía. Sospechan que aquí el imán y los terroristas, menores de 30 años, se encontraban a escondidas.

Sin embargo, ahora Vilvoordee tiene precisamente protagonismo por el éxito de sus políticas de desradicalización, que han convertido al pueblo en un referente. Por este motivo la noticia ha caído como una bomba entre los vecinos.

Por su parte, el secretario de Estado para el Asilo y la Inmigración, Theo Francken, dijo a través de su cuenta en Twitter que la oficina de extranjería no tenía noticias del clérigo de Ripoll, al menos no con ese nombre.

"Nunca recibió o solicitó una tarjeta de residencia. Por supuesto puede haber estado en Bélgica porque esta información no la tiene mi administración", indicó.