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Francia califica de crímenes contra la humanidad las actuaciones del régimen sirio

  • Espera que Rusia apoye una resolución de la ONU que sancione al gobierno de Asad
  • Al menos 2.000 civiles han muerto desde marzo en las revueltas sirias
  • La Liga Árabe propondrá a Asad el fin de la violencia y elecciones legislativas

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El ministro de Exteriores de Francia, Alain Juppé, ha expresado su deseo de que Rusia apoye una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que establezca un régimen de sanciones al gobierno sirio. Las actuaciones del régimen durante las protestas han sido calificadas como crímenes contra la humanidad por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

"El Consejo de los Derechos Humanos de la ONU está de acuerdo con nosotros en que el régimen sirio ha cometido un crimen contra la humanidad", ha argumentado el canciller francés.

Francia confía en que Rusia revise su postura actual y apoye una resolución al respecto. "Espero que Rusia nos apoye en el Consejo de Seguridad, a pesar de que ahora nuestras posturas no coinciden plenamente", ha añadido Juppé a los periodistas rusos después de reunirse en Moscú con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov.

Una llamada al diálogo

El político francés ha apuntado además que en estos momentos los gobiernos ruso y francés "valoran de forma diferente los deseos del pueblo sirio, que aspira a la ampliación de su libertad y democracia, y también la desproporcionada respuesta de las autoridades sirias, que ha provocado el derramamiento de sangre".

Lavrov, por su parte, ha destacado que su país no desean que en Siria se repita la guerra civil de Libia. "El mejor imperativo para solucionar la situación en Siria es el comienzo del diálogo y las negociaciones, a lo que en realidad llaman las autoridades sirias. Provocar a ciertas fuerzas de la oposición para que boicoteen (las negociaciones) es un camino en vano, que puede llevar a la repetición del escenario libio", apuntó.

En este sentido, Lavrov ha explicado que Rusia ha propuesto al Consejo de Seguridad un proyecto de resolución "que exige el fin de toda violencia, llama a las autoridades sirias a promover más activamente aquellas reformas que ya han empezado, e insta a la oposición a no provocar enfrentamientos armados ni rechazar la invitación al diálogo".

Continúa la violencia en Homs

Al menos 14 personas han muerto este miércoles por disparos de las fuerzas de seguridad en la ciudad de Homs, en el centro del país, según los grupos de oposición al régimen de Bachar al Asad.

Según el Observatorio sirio de Derechos Humanos (OSDH), la mayoría de las muertes se produjo durante el ataque de las fuerzas sirias cerca de la mezquita Jaled Ibn Walid, en el barrio de Jalediya, que también dejó decenas de heridos.

También se han cortado las comunicaciones telefónicas, mientras siguen escuchándose ráfagas de disparos y bombardeos desde la noche del martes en algunos barrios de esa misma localidad.

Mientras, los opositores Comités de Coordinación Local han anunciado que otras dos personas perdieron la vida en la ciudad de Sermin, en la provincia norteña de Idlib, mientras que en otras partes del país como en Hama (centro) continúa la campaña de detenciones.

Este grupo de oposición ha denunciado que en la ciudad costera de Latakia, ubicada en el norte de Siria, las fuerzas de seguridad han convertido una escuela en prisión debido a que no hay espacio suficiente en las cárceles para los detenidos, a quienes torturan e insultan sin cesar, según apuntaron.

Según la Liga Árabe, su secretario general, Nabi Al Arabi, se reunirá el próximo sábado con Al Asad y su ministro de Exteriores, Walid al Mualem, a quienes transmitirá la iniciativa acordada hace unos días en el seno de la organización panárabe para solucionar la crisis que atraviesa el país.

La Liga Árabe propone la retirada de las fuerzas militares

Esa propuesta consta de trece puntos entre los que destaca el cese inmediato de todos los actos de violencia contra los civiles y la retirada de las fuerzas militares de las ciudades sirias.

De esa forma, la Liga Árabe quiere que se ponga fin a la represión del régimen iniciada en marzo pasado contra los opositores que piden la caída del presidente, que ya ha dejado unos 2.500 muertos, según grupos de derechos humanos.

Asimismo, la organización panárabe reclama en su iniciativa la liberación de todos los detenidos políticos y acusados de participar en las manifestaciones, además de la reparación de los daños causados por la violencia.

Al Arabi iba a instar también a Al Asad a que anuncie una declaración de principios con todas las reformas democráticas que ha anunciado en los últimos meses y que inicie los contactos políticos con la oposición en igualdad de condiciones.

Además de establecer contactos con las fuerzas opositoras, la Liga Árabe pretende que se forme un gobierno de unidad nacional aceptado por estos grupos.

El proceso de democratización pasa, según esta iniciativa, por la organización de un congreso excepcional del partido gobernante Baaz para que modifique la legislación que actualmente impide establecer un sistema democrático en el país.

El futuro gobierno deberá, además, organizar unas elecciones legislativas en las que participen todos los partidos bajo la supervisión de la justicia siria.

Posteriormente, el presidente encargará al grupo parlamentario más numeroso formar un nuevo gobierno mientras que el Parlamento deberá convertirse en una asamblea constituyente que establezca una constitución democrática para el país, sometida luego a referéndum.