Juan Uslé viaja de la memoria a lo desconocido en una exposición en el Reina Sofía
- Juan Uslé. Ese barco en la montaña se puede ver hasta el 20 de abril en el MNCARS
- El artista cántabro transfigura sus recuerdos de infancia en pintura abstracta
Juan Uslé, nacido en Santander en 1954, es un niño que juega en las playas del Sardinero con despreocupación, bajo un sol implacable que reina sin piedad. El pequeño sufre una insolación y debe guardar reposo en una habitación a oscuras, por la persiana bajada se cuela un rayo de sol. A partir de esta experiencia, de este recuerdo de infancia, el cántabro pintará Mal de sol en 1994 (ver arriba).
Uslé confiesa que sigue siendo ese niño "con menos músculo, pero con más ambición" y mantiene "el hambre, el deseo de pintar con grandes dosis de exigencia y compromiso". El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía dedica una amplia retrospectiva a su obra, en una muestra que el artista, con guasa, considera "pequeña".
La exposición Juan Uslé. Ese barco en la montaña exhibe piezas pictóricas y fotográficas que abarcan 40 años de trayectoria del pintor, comisariada por Ángel Calvo Ulloa, puede verse desde el 26 de noviembre hasta el 20 de abril en la planta 1 del Edificio Jean Nouvel.
'Manthis', 1998-1999. Colección Museo Helga de Alvear. © Juan Uslé, VEGAP, Madrid, 2025
Uslé, uno de los artistas españoles de mayor proyección internacional, vuelve al Reina Sofía veinte años después de Rooms, la primera exposición que le dedicó el MNCARS. Ahora se despliegan un centenar de sus creacciones de colecciones públicas y privadas así como del fondo de Juan Uslé y Victoria Civera.
Donación de tres piezas
El director del Museo, Manuel Segade, ha agradecido la donación de tres piezas del artista que formaron parte de la Documenta 9 de Kassel. La exposición se articula en un recorrido circular por once salas que avanza de forma cronológica, pero refleja las interaccciones entre distintas familias de obras que se solapan en el tiempo.
Uslé indica que los visitantes pueden dibujar "un óvalo, una espiral o un círculo" al moverse frente a los cuadros. El discurso expositivo se acerca a los vínculos que la pintura establece con otros medios. Es el caso de las Notes, o notas pictóricas de viaje; de las pruebas de color que se agrupan bajo el denominador Notes on SQR (Soñé que revelabas); de los escritos o de la fotografía.
'Ojos de Fallujah'. Colección Uslé-Civera. © Juan Uslé, VEGAP, Madrid, 2025
En cualquiera de sus manifestaciones, estos apuntes han supuesto en la práctica artística de Juan Uslé un modo recurrente de ocupar y registrar el día a día: los viajes, las horas ociosas, la actividad en el estudio o la vida familiar.
La imagen soñada
La importancia de las imágenes y los relatos en la pintura de Uslé no radica en una influencia directa, sino en el vínculo subconsciente que su obra establece con el mundo visible y con la posibilidad de imaginar otros escenarios, donde la abstracción recrea imágenes pensadas, vistas o soñadas.
Uslé comienza su carrera a finales de los años setenta en su Cantabria natal, con obras en las que predominan los tonos oscuros y la calma visual. Formado en la Escuela de Bellas Artes de Valencia, se interesa por el paisaje abstracto y la fotografía.
'Amapola', 1991. Colección Soledad Lorenzo, MNCARS. © Juan Uslé, VEGAP, Madrid, 2025
De regreso a Santander, realiza piezas de carácter expresionista y en 1984 su trabajo se presenta por primera vez en ARCO. En 1987 se instala en Nueva York, donde su pintura evoluciona hacia formas de abstracción más personales con una paleta más brillante y fondos en cuadrícula.
Pintura, en trance
La expresión se reduce al ritmo, a menudo sinuoso, de líneas geométricas que evocan el latido de un pulso en una abstracción más lírica y silenciosa, sin estridencias. Uslé cuenta a TVE que practica un ejercicio de sincronización con el propio pulso, con música de fondo y que entra "en una especie de trance, que me tomo muy en serio, en un viaje, un perderme".
En estas obras, la superficie del lienzo queda saturada hasta sus márgenes, los colores son variaciones de un mismo tono y la pintura simula una piel que lo cubre todo. El artista explica que, al día siguiente, ve el resultado y decide si hay zonas que necesitan más luz, con lo que pinta en dos fases. "Una primera más performática y una segunda más pictórica".
'Mi-Mon (Miró versus Mondrian)', 1992. Colección Uslé – Civera. © Juan Uslé, VEGAP, Madrid, 2025
Premio Nacional de Artes Plásticas, Uslé ha participado en la Bienal de Venecia y en la Documenta 9 de Kassel en 1992, que supuso su consagración internacional. La obra Mi-Món (ver arriba), formaba parte de la feria alemana, en ella juega con dos refentes como Joan Miró y Piet Mondrian. El trabajo de Uslé está presente en colecciones públicas y privadas internacionales, entre las que se encuentran el MoMA de Nueva York, el Centre Pompidou de París o la Tate Modern de Londres.
El poético título de la exposición Ese barco en la montaña hace referencia al naufragio del Elorrio, un mercante de grano que naufragó frente a las costas de Langre el 21 de diciembre de 1960. El buque acabó destrozado contra las rocas y murieron los 20 tripulantes y un joven que ayudaba al salvamento desde tierra.
'Sin título', 1987. Colección Uslé-Civera. © Juan Uslé, VEGAP, Madrid, 2025
La infancia siempre vuelve en la obra de Uslé, también lo hace en la instalación Línea Dolca (2008-2018), compuesta por 170 fotografías y 9 pinturas, que ocupa dos de las salas centrales del recorrido. Una línea continúa de imágenes en pequeño formato se despliega por el perímetro sobre un fondo color chocolate en un diario visual de su universo creativo.
El título de la serie alude a una antigua foto familiar, en la que el pintor con menos de seis años sostiene una tableta de chocolate Dolca. Esta tarde el artista y el comisario mantienen una charla a las siete de la tarde en el Auditorio 400 del Reina Sofía. La entrada es libre hasta completar el aforo.
Juan Uslé. Ese barco en la montaña es un viaje sensorial de la memoria a lo desconocido, sin mapa, ni brújula al que el MNCARS nos invita del otoño a la primavera, del 26 de noviembre al 20 de abril.