El Vaticano investiga al obispo de Cádiz por presuntos abusos sexuales en la década de los 90
- El Obispado de Cádiz y Ceuta califica los hechos de "muy graves y falsos" y confía en la investigación
- El obispo suspende su agenda "para el esclarecimiento de los hechos y para atender el tratamiento de un cáncer"
El Vaticano investiga por primera vez a un obispo español por pederastia. El tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España ha abierto una investigación previa al obispo Rafael Zornoza por presuntos abusos sexuales continuados a un menor entre 1994 y principios de los años 2000, cuando era sacerdote y dirigía el seminario de la diócesis de Getafe (Madrid). El caso ha prescrito para la justicia ordinaria y podría abrirse un juicio canónico.
El Obispado de Cádiz y Ceuta ha hecho público este lunes un comunicado, tras desvelar el diario El País esta investigación eclesiástica, en el que anuncia, además, la suspensión temporal de la agenda del obispo "para el esclarecimiento de los hechos y para atender el tratamiento de un cáncer agresivo que está recibiendo".
"Las acusaciones que se hacen, referidas a hechos que tuvieron lugar hace casi treinta años, son muy graves y además falsas", afirma el Obispado en su comunicado en el que informa de que el caso ha sido "introducido" la semana pasada en el tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España.
La diócesis ha expresado su "plena confianza en la justicia" y ha asegurado que colaborará "en todo lo que sea requerido", al tiempo que ha recordado "el respeto a la presunción de inocencia que asiste a todas las personas". Añade que no hará más declaraciones hasta conocer la decisión del tribunal eclesiástico.
La Conferencia Episcopal reconoce "verosimilitud a la acusación"
El presidente de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, reconoce "con dolor" que el hecho de que el Vaticano haya abierto una investigación sobre el obispo de Cádiz, Rafael Zornoza, "concede una verosimilitud a la acusación" de abusos a un menor que se formula contra él, pero al mismo tiempo ha pedido respetar la presunción de inocencia.
En declaraciones a los medios de comunicación en Las Palmas de Gran Canaria recogidas por EFE, Argüello ha asegurado que la Iglesia quiere "conocer la verdad" y ha pedido colaboración a la Diócesis implicada, a la vez que ha declarado que "no corresponde" a la Conferencia Episcopal Española apartar temporalmente a Zornoza, sino a la Santa Sede.
Mientras, las asociaciones de víctimas creen que pueden salir más casos.
Miguel Hurtado, primer denunciante de los abusos en la abadía de Montserrat, ha afirmado que las víctimas de abusos en la Iglesia "van perdiendo el miedo a denunciar poco a poco" y el "cambio de mentalidad" está provocando que cada vez "se atrevan a denunciar a personas con mayor poder" dentro de la Iglesia.
Por su parte, la diócesis de Getafe, de la que formaba parte Zornoza cuando presuntamente cometió los abusos, se ha puesto a disposición de los tribunales competentes para "cualquier colaboración" y ha dicho, en un comunicado, que "hasta el día de hoy, ninguna instancia oficial de la Diócesis ha recibido alguna acusación formal sobre los hechos publicados". Además, ha manifestado su firme condena a todo tipo de abuso y su compromiso en la lucha contra estos, poniendo todos los medios posibles que eviten factores de riesgo y aumenten la prevención.
El Vaticano ha abierto una investigación a Zornoza por presuntos abusos sexuales continuados a un menor en la década de los 90 al que "metía en su cama casi todas las noches y las mañanas para besarle y tocarle las partes íntimas". Los hechos comenzaron en el año 1994 y ocurrieron cuando el joven contaba con entre 14 a 21 años de edad.
El diario detalla que la víctima envió este verano una denuncia por correo al Dicasterio para la Doctrina de la Fe, que ha admitido a trámite la investigación canónica, lo que convierte al obispo de Cádiz y Ceuta en el primer prelado en España conocido públicamente bajo investigación del Vaticano por presunta pederastia.