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La era Trump

Trump asegura que EE.UU. ha derribado un dron iraní en el estrecho de Ormuz

  • Según Trump, la aeronave no tripulaba se acercó a uno de sus barcos en el Estrecho
  • Irán asegura que no ha perdido ningún dron y que EE.UU. ha podido derribar un aparato propio

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Trump asegura que EE.UU. ha derribado un dron iraní en el estrecho de Ormuz

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado este jueves que la Armada estadounidense ha derribado un dron iraní que volaba cerca de uno de sus buques en el estrecho de Ormuz.

En un acto en la Casa Blanca, Trump ha informado de que el USS Boxer, un barco anfibio de asalto, destruyó un avión no tripulado que se acercó a menos de un kilómetro y no se retiró pese a las advertencias. "El dron resultó destruido inmediatamente", ha dicho Trump.

"Esta es la última de muchas acciones provocativas y hostiles de Irán contra los barcos que operan en aguas internacionales", ha explicado el presidente estadounidense. "Estados Unidos se reserva el derecho de defender a nuestro personal, instalaciones e intereses", ha añadido, y ha pedido colaboración a "todas las naciones" para garantizar la libertad de navegación en el golfo Pérsico.

El Pentágono ha comunicado posteriormente que el USS Boxer tomó a media mañana de este jueves, hora local, una "acción defensiva" contra un dron, sin mencionar si el avión no tripulado era o no iraní.

Las autoridades iraníes han negado haber perdido ningún dron, y el viceministro de Exteriores, Abbas Araqchi, ha sugerido en Twitter que los estadounidenses han derribado uno de sus propios aparatos "por error".

Crece la tensión en Ormuz

Despliegue militar estadounidense, ataques a petroleros, drones abatidos... La tensión aumenta en el estrecho de Ormuz, reavivada desde que en mayo de 2018 Estados Unidos se retiró unilateralmente del acuerdo nuclear iraní y más tarde restableció las sanciones contra Teherán, en especial a las exportaciones de petróleo, vitales para la economía de Irán.

En los últimos meses, en la medida en que EE.UU. ha aumentado progresivamente su presencia militar en la zona, el golfo Pérsico se ha convertido en un escenario de una escalada de tensión entre ambos países, con sabotajes y ataques a petroleros y buques cisterna por autores no identificados. El escenario es el estrecho de Ormuz, la vía de comunicación petrolera más importante del mundo.

Estados Unidos ha responsabilizado de estos ataques a Irán, que ha negado su implicación, aunque sí se atribuyó asimismo el derribo de un dron estadounidense hace un mes, alegando que había violado su espacio aéreo. En respuesta, Trump llegó a aprobar un ataque selectivo contra Irán, pero finalmente suspendió la orden poco antes de que el Pentágono la ejecutase al considerar que no habría sido una respuesta "proporcionada" al derribo del dron, dado el número de bajas que iba a causar.

Sanciones a proveedores de suministros del programa nuclear iraní

Por otra parte, el Gobierno de Estados Unidos ha anunciado este jueves sanciones contra compañías e individuos vinculados a una red que adquiría "materiales sensibles" para el programa nuclear de Irán, y que tienen sede en Irán, China y Bélgica.

Según ha informado el Departamento del Tesoro en un comunicado, las personas y empresas sancionadas actuaron como una "red de adquisiciones" para la empresa Iran Centrifuge Technology Company (TESA).

El secretario del Estado, Steven Mnuchin, ha señalado que la administración de Trump "está profundamente preocupada por el enriquecimiento de uranio del régimen iraní y otros comportamientos provocadores".

En respuesta a las sanciones estadounidenses, el pasado mes de mayo las autoridades iraníes anunciaron que dejaban de cumplir algunos de sus compromisos nucleares hasta que las otras partes garantizaran los intereses económicos de Irán estipulados en el llamado Plan Integral de Acción Conjunta. Irán ya ha superado desde entonces el límite de almacenamiento de uranio de 300 kilos y el nivel de enriquecimiento del 3,67% permitidos en el acuerdo nuclear de 2015.