Rusia refuerza las defensas antiaéreas sirias tras el derribo de un avión ruso

• Moscú entregará a Damasco un sistema de misiles antiaéreos S-300
• Los misiles tienen un rango de acción de 250 metros y pueden atacar varios blancos
• El ministro de Defensa ruso lo relaciona directamente con el derribo de uno de sus aviones

Archivo: Sistemas de baterías anti-aéreas S-300 (derecha) y S-400 (izquierda) durante una feria de armamento en la ciudad de Zhukovski, Rusia, en 2014

Rusia suministrará a Siria en un plazo de dos semanas un sistema de misiles antiaéreos S-300, con los que podrá defenderse de ataques como el lanzado por Israel hace una semana. En aquel ataque, las defensas sirias derribaron un avión ruso con 15 militares a bordo y Rusia culpó a Israel.

"Las fuerzas armadas sirias recibirán en un plazo de dos semanas un sistema de misiles antiaéreos S-300, capaz de interceptar medios de ataques aéreos a una distancia superior a 250 kilómetros y atacar simultáneamente varios objetivos", ha declarado el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, en una nota difundida por su gabinete y recogida por Efe.

Shoigu no ha dejado lugar a dudas al afirmar que la decisión está directamente relacionada con el derribo del avión ruso. "Quiero subrayar que en 2013 habíamos suspendido el suministro de los S-300 a Siria por petición de la parte israelí. Ahora la situación ha cambiado, y no por nuestra culpa", ha declarado el ministro.

“En 2013 habíamos suspendido el suministro de los S-300 a Siria por petición de la parte israelí. Ahora la situación ha cambiado“

Rusia espera que la llegada de los S-300 a Siria "enfríe las cabezas calientes contra actuaciones que ponen en peligro a nuestros militares", ha añadido Shoigu. "De lo contrario nos veremos obligados a reaccionar según la situación".

El Ministerio de Defensa ruso ha asegurado que los pilotos israelíes usaron el aparato ruso, un IL-20, como escudo frente a la defensa antiaérea siria el pasado 17 de septiembre. El portavoz de la cartera rusa, el general Ígor Konashenkov, ha acusado a los pilotos de "falta de profesionalidad" y "negligencia criminal".

El Kremlin ha asegurado que el incidente dañará las relaciones entre Rusia e Israel.