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Murdoch cierra su periódico más vendido por el escándalo de los pinchazos telefónicos

  • El número del próximo domingo será el último de 'News of the World'
  • Tiene más de 100 años de historia y era líder dominical
  • Toma esta decisión por sorpresa para salvaguardar la compra de BSkyB

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Rupert Murdoch cierra el 'News of the World' por el escándalo de las escuchas telefónicas

El magnate de la comunicación Rupert Murdoch ha decidido cerrar el tabloide News of the Worldel periódico de mayor tirada de Reino Unido, de forma sorpresiva por el escándalo de las escuchas telefónicas a políticos, famosos y ciudadanos anónimos que han puesto en jaque a su grupo de comunicación y ha consternado a la sociedad británica.

En uno de los giros más inesperados en su carrera, el magnate australiano de 80 años ha acabado con un periódico de 168 años de historia y con 2,8 millones de ejemplares de tirada ante las últimas revelaciones.

Según asegura en un comunicado James Murdoch, hijo del magnate y vicedirector general del grupo, "News of the World está en este negocio para hacer que otros rindan cuentas por lo que hacen pero ha fracasado en rendir cuenta por él mismo".

Por este motivo, "este domingo será el último número de News of The World y Colin Myler -el actual editor- editará la última edición del periódico", añade.

Indignación popular

La noticia llega después de una catarata de informaciones esta semana sobre los pinchazos generalizados cometidos por el tabloide en la primera década de este siglo, que van desde pinchar el teléfono a una niña asesinada hasta hacerlo con víctimas de los atentados de Londres y familiares de soldados fallecidos en Afganistán.

Estos hechos han puesto en jaque a la cultura de tabloides británicos, pese a que las escuchas a políticos y a la Casa Real por el tabloide eran conocidas desde 2006 y ya habían provocado la condena de su corresponsal de Casa Real y la dimisión de Andy Coulson, su entonces editor y después jefe de prensa del primer ministro británico, David Cameron.

Precisamente la posición de Cameron se ha visto muy comprometida por este asunto tanto por sus lazos con Coulson, que tuvo que dimitir a principios de año al conocerse que la escuchas eran generalizadas, y su relación tanto con Murdoch como con su mano derecha en Reino Unido, Rebekah Brooks, implicada ahora de lleno en el escándalo.

Downing Street ha negado cualquier presión sobre Murdoch para el cierre de News of the World, aunque Cameron ya había anunciado este miércoles que abriría una investigación sobre el comportamiento del periódico y de los tabloides y también de la Policía, que presuntamente habría recibido sobornos del periódico para que no siguiese investigando el escándalo.

"Algo inhumano"

En el comunicado remitido a su personal, Murdoch ha señalado que el dominical, con 168 años de historia, se ha "mancillado por un comportamiento equivocado" y ha añadido que "de hecho, si las recientes acusaciones son ciertas, (las escuchas han sido) algo inhumano y no tienen cabida en nuestra empresa".

"Aunque nunca seremos capaces de arreglar todo el mal que ha sido causado, lo correcto es que por cada penique de beneficios que recibamos este fin de semana vaya a organizaciones -muchas de las cuales son amigos desde hace largo tiempo y socios- que mejoran la vida de Reino Unido y se dedican a tratar a otros con dignidad", prosigue la nota.

Estas palabras son una referencia directa a la gota que ha colmando el vaso, la publicación de que el tabloide pinchó los teléfonos de familiares de soldados fallecidos en Afganistán, lo que ha hecho que la Legión Real Británica, que tiene una campaña conjunta con el rotativo, cancelase su colaboración.

Lo cierto es que según los medios británicos News of the World se había quedado prácticamente sin anunciantes tras los anuncios en cadena de empresas como Ford o Halifax de que retirarían sus espacios.

"Seamos claros, no ha sido Ruper Murdoch el que ha cerrado este periódico; han sido las familias decentes de todo el país que han mostrado su indignación por las revelaciones que han bombardeado a esta compañía esta semana. Es una victoria de la gente decente del país y yo digo ¡adiós y buen viaje! al News of the World", ha declarado a SkyNews el diputado laborista Tom Watson.

Esta decisión supone acabar con el periódico británico de más tirada y con más de un siglo de historia, de la que 42 años ha estado en manos de Rupert Murdoch, que lo convirtió en bandera de la prensa amarilla hasta el punto de que recibió los apelativos humorísticas de 'Polvos del mundo' o 'Noticias de polvos'.

¿Salvaguardar la operación de BSkyB?

El escándalo, del que habrían hasta 4.000 afectados según las cifras que maneja la Policía Metropolitana de Londres, se produce en un momento en el que el grupo de Murdoch quería conseguir el visto bueno del Gobierno a la compra de la plataforma digital BSkyB, la mayor de Reino Unido, en una de las mayores operaciones de la historia del sector, valorada en 15.000 millones de dólares.

Fuentes del Gobierno británico han filtrado a la prensa que la decisión definitiva del Ministerio de Cultura se podría posponer varias semanas hasta el mes de septiembre a la luz de los altos acontecimientos, un movimiento que puede perjudicar seriamente los intereses del grupo.

La opción de Murdoch ha sido dar un golpe de efecto que nadie se esperaba con el que quiere congraciarse de nuevo con la opinión pública y aclarar el panorama de su fusión. Para ello ha acabado precisamente con el medio que supuso su desembarco en 1969 en Reino Unido.

"El cínico que hay en mí me sugiere que se trata de una treta para quitar presión a la compra de BSkyB", ha asegurado el diputado liberal-demócrata Adrian Sanders.

¿Y los empleados?

"Alucinante, me he quedado patidifuso. Es una especie de 'opción nuclear'", ha asegurado a Reuters el profesor de Comunicación de la Universidad de Westiminser Steven Barnett, que recuerda que "va a haber mucha gente que va a perder su trabajo".

En su nota a los empleados, James Murdoch ha reconocido que muchos de los actuales periodistas del periódico, si no casi todos, no estaban ni siquiera en la compañía o en el periódico cuando ocurrieron los hechos, pese a lo cual cerrar el tabloide es, a su juicio, "la decisión más correcta".

Quien sí estaba es la actual directora ejecutiva de la rama británica del grupo Murdoch, que dirigía News of the World cuando se pinchó el teléfono de la niña Molly Dowler y que seguirá en su puesto pese a las insistentes peticiones de dimisión.

"Pienso que el anuncio que James Murdoch debería haber hecho esta noche es el cese de Rebekah Brooks. Es la gente que está en los puestos directivos los que tienen que ser castigados, no los periodistas de a pie", ha denunciado Michalle Stanistree, secretaria general del sindicato britanico de periodistas.