Enlaces accesibilidad

España tira de casta y oficio para ganar a Túnez

  • Los de Valero se clasifican a la 2ª fase gracias a su solidez defensiva (21-18)
  • El acierto de Rocas y A. Entrerríos, y las paradas de Hombrados; las claves
  • Al descanso se fueron ambos equipos con un sorprendente 9-7 en el marcador
  • Ver también: Especial Mundial de Balonmano 2011    

Por

España supo imponerse a Túnez

Ficha técnica:

18 - Túnez: Hamza; Touati (1), Gharbi (1), Tej (4), Hedoui (3), Sami (-) y Megannem (4) -equipo inicial- Missaoui (ps), Braham (ps), Lagha (1), Haj Youssef (-), Gatfi (-), Mrabet (1), Ayed (-), Saied (1) y Jallouz (2)

21 - España: Hombrados; Roberto García (-), Gurbindo (1), Raúl Entrerríos (1), Alberto Entrerríos (5), Juanín García (3) y Garabaya (-) -equipo inicial- Sterbik (ps), Rocas (4), Maqueda (-), Cañellas (-), Chema Rodríguez (1), Romero (2p), Viran Morros (2), Ugalde (-) y Aguinagalde (2)

Ni la dureza en defensa de 'Las Águilas de Cartago', ni la increíble actuación de su portero Hamza han impedido que España sume dos nuevos puntos en el Mundial de Suecia.  Una gran defensa y una concentración reseñable

 durante los 60 minutos han hecho que Valero Rivera haya respirado hondo al ver cómo su equipo supera el primero de los dos partidos cruciales. Había predicho que el partido contra Túnez era clave y que para ganarlo habría que estar muy bien en defensa y eso es lo que ha hecho el equipo español.

Pocas veces se ha visto una primera parte en un Mundial con un registro anotador tan bajo: nueve goles España, siete Túnez.

Y es que el primer gol del partido no llegó hasta el minuto ocho, a favor del equipo tunecino. A España le costó más estrenarse, diez minutos pasaron hasta que Alberto Entrerríos pudo batir por fin al portero Hamza que se estaba convirtiendo, hasta esos momentos, en el protagonista del choque. Entre el guardameta y la mala suerte, España había desperdiciado seis ataques.

La solidez defensiva que exigía el seleccionador  comenzó a dar sus frutos y España consiguió un parcial de 4-0 hasta que Túnez volvió a marcar otro gol.

En los norteafricanos, sorprendió la efectividad de Jallouz que recogió el testigo de los desafortunados Megannen y Tej. El lateral mantuvo a los suyos a poca distancia en el marcador durante la primera parte.

En los últimos diez minutos del primer tiempo España se descolocó y bajó el listón en defensa. Una serie de errores propiciaron que los norteafricanos llegaran incluso a empatar el partido.

De nuevo en superioridad numérica, como así fue en las otras dos que Túnez sufrió en el primer período, los de Valero volvieron a abrir brecha e irse al descanso con una renta de dos goles, 9-7. Durante todo el partido se vio que Túnez sufría cada vez que se quedaba en inferioridad.

Como dato curioso que corroboraba la efectividad de las dos defensas, decir que los colegiados solo tuvieron que señalar un siete metros en toda la primera mitad y llegó en el 27’. Lástima que el lanzamiento no lo aprovechó ‘el artista’ Juanín García.

Tras el descanso, el central Megannen se echó el equipo a la espalda y por él pasaban todas las acciones de ataque de los norteafricanos. Su ímpetu se vio ayudado por una exclusión de Viran Morros que propició que Túnez lograse empatar el partido.

España no se salió del partido en ningún momento pero tenía mucha dificultad para materializar en gol las ocasiones por culpa de una increíble actuación del portero Hamza.

Una nueva exclusión, esta vez de Garabaya, facilitó que los tunecinos se pusieran por delante en el marcador 12-14.

Con la igualdad numérica apareció un efectivo Albert Rocas que desde el extremo y sorprendiendo desde los seis metros puso el empate en el tanteador de nuevo.

Eran los momentos decisivos y fue Alberto Entrerríos el que tomó la responsabilidad que normalmente suele tener un Iker Romero desaparecido en el partido.

Las cosas se complicaron a falta de diez minutos con la segunda exclusión del avilesino Carabaya pero fue en ese preciso instante cuando sobresalió la figura del capitán, José Javier Hombrados. El cancerbero, que jugó todos los minutos dejando a Sterbik en el banco, sacó dos goles cantados y transmitió a sus compañeros una confianza enorme de cara a la recta final del partido.

España llegó a los últimos minutos con ventaja en el marcador y con el pitido final se materializaba la clasificación para la segunda fase con la suma de dos nuevos puntos.

Ahora toca Alemania en menos de 24 horas y los de Valero necesitarán de la misma solidez defensiva y de la aportación de hombres clave en este equipo como Iker romero y Arpad Sterbik.