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España prepara su oro en el combo

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La antesala del oro en el combo

El equipo español de natación sincronizada se clasificó en primera posición para la final de combinada en estilo libre en el Mundial de Natación de Roma 2009, que se celebra hasta el próximo 2 de agosto en la capital italiana.

Las españolas, que nadaron a ritmo de una balada rock, obtuvieron una puntuación global de 97.500 y se impusieron al resto de participantes, un resultado que, de repetirse como ha ocurrido con el resto de categorías de natación sincronizada, supondría mañana el primer oro para España en el Mundial de Roma.

España, que ejecutó su ejercicio en décimo lugar, llevó a las piscinas del Foro Itálico de Roma a Clara Basiana, Alba Cabello, Ona Carbonell, Raquel Corral, Margalida Crespi, Andrea Fuentes, Thais Henriquez, Paula Klamburg, Gisela Morón e Irina Rodríguez.

Una nota discordante el ejercicio español

Pese a la buena puntuación recibida por las españolas, el equipo ha tenido una nota muy discordante. Entre los 9,9 y 9,8 recibidos por las de Anna Tarrés en la impresión artística, una de las seis jueces ha puntuado con 9,2 el ejercicio de las españolas.

Las españolas, que contaban en el equipo con la reciente medalla de plata por parejas en rutina técnica Andrea Fuentes, obtuvieron una calificación en mérito técnico de 9.8, 9.8, 9.7, 9.7 y 9.8, mientras que las puntuaciones en impresión artística fueron de 9.8, 9.9, 9.8, 9.6 y el discordante 9,2.

Poco después de la ejecución del ejercicio, y cuando ya sabían casi por seguro que pasarían primeras a la final, las españolas mostraron su confianza en alcanzar mañana el máximo metal, aunque no sucumbieron ante el optimismo y quisieron también transmitir cautela.

"Hay que nadarlo primero, es una rutina de riesgo", comentó la seleccionadora nacional, Anna Tarrés, quien explicó que primero para alcanzar el oro hay que "asegurar todos los elementos de riesgo".

Lo cierto es que las españolas supieron imponerse al resto de rivales en una clasificatoria en la que las grandes ausentes fueron las rusas, hasta ahora grandes vencedoras de la sincronizada, y en la que las chinas quedaron segundas con una valoración de 96.666 con una clara apuesta por la música lírica.

Y mientras China se movía en la lírica, las canadienses pasaron a la final como terceras, nadaron con ritmos mucho más modernos y metálicos, con varias acrobacias que les valieron una gran ovación del público y una puntuación de 96.000.