Paula Vázquez nos lleva 'Hasta el fin del mundo': "Este programa es un viaje al interior"
- Paula Vázquez presenta en Las tardes de RNE el programa, Hasta el fin del mundo, con estreno el 12 de noviembre en La 1
- Seis parejas de famosos competirán por llegar los primeros a un destino de América Latina sin usar aviones ni dinero
Con un mapa, una mochila y un compañero de ruta se puede llegar Hasta el fin del mundo. Literalmente. Y, además, no querer volver. O incluso desear repetir la experiencia, pese al reto. Selvas, volcanes, desiertos, montañas, grandes ciudades, pueblos remotos y ni rastro de GPS. Nada de billetes en primera clase y, mucho menos, teléfono móvil. "Es un viaje que va de volver a lo esencial".
Y dentro de unos días —el próximo miércoles 12 de noviembre, a partir de las 23.10 horas— los espectadores de La 1 de Televisión Española y RTVE Play lo podrán comprobar.
"Hemos recorrido toda Latinoamérica. En total, han sido ocho países en dos meses", adelanta la presentadora de Hasta el fin del mundo, Paula Vázquez (Ferrol, 1974) en los micrófonos de Las tardes de RNE, con David Cantero y Marta Solano.
"El equipo técnico y yo hemos llegado a coger hasta 20 vuelos y a rehacer más de 200 maletas", calcula. Los concursantes igual, solo que sin aeroplanos ni equipaje. Su aventura ha sido multiplicada al extremo. "Han tenido que hacerlo de forma más cruda: por tierra y con un presupuesto mínimo. Les dimos el dinero exacto para coger un avión desde Costa Rica, que es donde empieza la carrera, hasta Ushuaia, en Argentina", explica.
No hubo un céntimo más, y tampoco podía haber un céntimo de menos. "Si alguna de las parejas se quedaba a cero con el dinero que les habíamos entregado al principio, quedaban descalificados", apunta la gallega.
Doce famosos divididos en parejas buscan llegar los primeros a la meta
Eran, por tanto, doce personas muy reconocidas del país cruzando en equipos —Yolanda Ramos y su sobrina Ainoa Olivares Ramos; Alba Carrillo y Cristina Cifuentes; Jedet y Andrea Compton; Rocío Carrasco y Anabel Dueñas; NIA y J Kbello; y Aldo Comas y José Lamuño— América Latina de norte a sur con lo justo para avanzar y lo suficiente para aprender a perderse. A ver(se) y encontrar(se).
"Este programa es un viaje, pero, sobre todo, es un viaje al interior. Por todo lo que hemos vivido, ninguno hemos vuelto siendo las mismas personas", reconoce Paula Vázquez.
No es de extrañar. Han presenciado paisajes tan increíbles que daba la "sensación de que nada cabía dentro de una imagen", convirtiendo al reality en un "programa muy hermoso de ver". Tanto incluso que "había algún que otro concursante que dejaba más de lado la carrera porque su ruta era tan chula que se desviaba para disfrutar de alguna localización".
Y es que, ¿cómo volver a España igual si "hubo momentos en los que tuvieron que desarrollar el ingenio" al máximo. Sin vergüenza. Sin ayuda. Sin nada que perder? "Gente como Jedet llegaba a los sitios y se inventaba un pasado truculento para pedir cama en un hotel", recuerda la presentadora sonriendo. A veces, era la "viuda del doble de un actor famoso", en otras ocasiones, su personaje variaba. Dependía de la circunstancia.
Porque ningún día era igual. La aventura duraba dos meses, sin embargo, el reto era diario. Caminar, correr, hacer autostop o subirse al primer medio de transporte barato que apareciera. "Hasta que aprendieron cuáles eran los autobuses nocturnos buenos, con cama, llegaron a viajar en muy malas condiciones", señala Vázquez.
La incertidumbre era un miembro más en todos los equipos, a los que, por momentos, también se les sumó el miedo como integrante. "Hay cosas que no sé si se van a ver en los episodios", confiesa la presentadora. "Como el mensaje al grupo de la productora diciendo que desviábamos la ruta porque unos indígenas habían puesto una bomba o porque se había derrumbado una carretera por las lluvias".
Así que, de nuevo y con todo ¿cómo no acabar esta aventura siendo una persona nueva? "A la mitad estábamos rotos, pero todos dieron un repunte increíble, con unas ganas de superación que realmente parecía que se estaban dejando allí algo", aplaude una Paula Vázquez todavía "fascinada" por esa capacidad de resiliencia y "evolución" de los protagonistas.
"Han salido fortalecidos. Aunque cada pareja tenía una ruta diferente, se creó una hermandad sin competitividad, con el deseo de que cada uno superara sus miedos", sostiene. "Cristina Cifuentes, sin ir más lejos —ejemplifica la presentadora—, tenía pánico a escalar y terminó subiendo 50 metros. Cosas así sucedieron con muchos otros. Se nota el antes y el después".
Las tardes de RNE