Ni Julia Roberts iba a protagonizar 'Durmiendo con su enemigo' ni el final de la película iba a ser así: ¿Qué pasó?
- La película de 1991 recaudó casi 175 millones de dólares en taquilla
- Durmiendo con su enemigo está disponible gratis en RTVE Play
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En 1991, Julia Roberts era toda una superestrella. La novia de América se había ganado a pulso el corazón del público con Mystic Pizza, Magnolias de acero y, sobre todo, Pretty Woman, su comedia romántica por excelencia y estrenada unos meses antes. En febrero de 1991, todo el mundo seguía hablando de su Vivian Ward. Julia Roberts estaba nominada al Oscar por su actuación y sorprendía estrenando una película que nada tenía que ver con su papel más famoso: Durmiendo con su enemigo.
La película ponía en el centro de su relato a la violencia machista. Bajo la apariencia de un matrimonio perfecto, su protagonista sufría el maltrato de un marido cruel y obsesivo hasta el punto de decidir fingir su propia muerte y así poder empezar una nueva vida. La pesadilla no acababa ahí. Al darse cuenta de que en realidad no había fallecido, él trataba de dar con su paradero.
Con 19 millones de dólares como presupuesto y basada en una novela de Nancy Price, la recaudación de Durmiendo con su enemigo se disparó hasta aproximadamente los 175. Julia Roberts sirvió de reclamo para la cinta, aunque lo cierto es que inicialmente no la iba a protagonizar.
Kim Basinger rechazó el papel
Julia Roberts no fue la primera opción para interpretar a la protagonista de Durmiendo con su enemigo. Se lo propusieron primero a Kim Basinger, pero la actriz de 9 semanas y media lo rechazó y rodó en su lugar otra película que acabaría dando un vuelco a su vida.
"Hubo momentos en los que podría haber elegido mis películas mejor. Hice Ella siempre dice sí (The Marrying Man), en la que conocí al que sería mi marido, Alec Baldwin, pero también me habían ofrecido Durmiendo con el enemigo", confesó a The Edit décadas después, en 2016. Kim Basinger tuvo una hija con su coprotagonista en aquella película, de quien se acabó divorciando. "¿No es gracioso que rechazara Durmiendo con su enemigo y que me fuera a dormir con el enemigo?", bromeó entonces.
Kim Basinger y ALec Baldwin en 'Ella siempre dice sí'
Kim Basinger se cayó del reparto y pasó a liderarlo Julia Roberts, que venía de llevarse un Globo de Oro y estar nominada al Oscar por Magnolias de acero. El fichaje de una estrella tan en auge como ella –todavía no había estrenado Pretty Woman, lo haría una semana antes de empezar el rodaje de Durmiendo con su enemigo– hizo que sus parejas en pantalla no igualaran su fama.
En su lugar, optaron por rostros prácticamente desconocidos. El irlandés Patrick Bergin dio vida al marido maltratador del personaje de Julia Roberts, mientras que Kevin Anderson se metió en la piel del profesor del que se enamora en su huida. Ambos eran, sin embargo, bastante mayores que Julia Roberts, que tenía solo 22 años cuando rodó Durmiendo con su enemigo. Kevin Anderson le sacaba 9 años, aunque la diferencia de edad con Patrick Anderson era todavía más exagerada: se llevaban 17 años. Kevin Anderson y Julia Roberts, por cierto, acabarían coincidiendo en otro proyecto, La telaraña de Carlota, si bien Roberts no estuvo en plató: dobló a la araña protagonista.
Así iba a ser el final de Durmiendo con su enemigo
Julia Roberts y Patrick Bergin mantuvieron las distancias durante el rodaje, sobre todo conforme fue avanzando el proceso. En los ensayos, ni siquiera hablaban entre ellos. "Nuestra idea era, en lugar de analizar la escena y tratar de encontrar razones, no nos hablemos y veamos cuánta tensión se puede acumular durante ese tiempo. Ese es el tipo de película que hicimos: una en la que todo lo que no se dice es más importante que lo que se dice", contó hace años a Yahoo.
Patrick Bergin y Julia Roberts en 'Durmiendo con su enemigo'
Bergin fue también el responsable de cambiar la escena más importante de la película, su tenso final, con el marido de la protagonista a punta de pistola. Aunque en el filme tal como lo conocemos no se da ninguna excusa ni explicación acerca del cruel personaje, en realidad el guion sí lo incluía. "Había tres páginas de monólogo al final de la película cuando Martin finalmente encuentra a Laura en el que explico todas las razones por las que soy como soy", revelaba el actor.
La intensidad de la escena, sin embargo, se le resistía a Bergin, que no lograba mantenerla durante tanto tiempo. Cuando lo comentó en la primera lectura del guion y el director le preguntó qué diría él, lo resumió en tan solo una frase: "No puedo vivir sin ti y no dejaré que tú vivas sin mí". Es lo que dice en la película antes de que Laura llame a la policía, apriete el gatillo y mate a su marido de tres disparos.
Así se fraguó la escena más memorable de Durmiendo con su enemigo, que puedes ver en RTVE Play. La película se suma al amplio catálogo de cine de la plataforma, en el que se encuentran cintas como Downton Abbey, Els Encantats o Lejos del mar.
