Yotam Ottolenghi presenta 'Compartir', un recetario de comida reconfortante
PÁGINA DOS
- El nuevo libro de cocina del chef Yotam Ottolenghi es un homenaje a los platos de la nostalgia y el recuerdo
- Compartir habla de los lazos familiares y los profundos vínculos entre los alimentos y las emociones
El equipo de Página Dos ha viajado a Londres para entrevistar a Yotam Ottolenghi en la que ya considera su ciudad, puesto que vive en ella desde 1997. El chef acaba de publicar Compartir (Salamandra), un recetario cuyo título es una declaración de intenciones. Este cocinero nacido en Jerusalén es un defensor de la comfort food; esos platos reconfortantes que, después de una conversación tensa o al llegar a casa después de un día duro, o simplemente una noche de mucho frío, son un cobijo para el alma.
Para Ottolenghi, la comfort food son recetas que llevan de vuelta a la infancia, recuerdan a un ser querido o a un lugar donde uno fue feliz. Alimentar el espíritu, no complicarse la vida, apelar a la nostalgia, darse un homenaje: todo esto cabe en la idea de comida reconfortante. Es un concepto muy personal, inseparable de la propia biografía, y también es culturalmente específico. Macarrones, ramen de pollo, sanjacobos, pizza, sopa de cocido, lentejas, platos de cuchara; esos son algunos de los platos que podrían aparecer en el imaginario local. Ottolenghi, y ahí reside parte de su éxito, siempre ha apostado por recetas a un tiempo sencillas y creativas, familiares e innovadoras, hogareñas y reveladoras.
Recuerdos de familia en los fogones
En Compartir, cuenta el chef, «nuestras trayectorias personales nos han servido para comprender el vínculo entre comida reconfortante e inmigración. Cuando nos instalamos en un lugar desconocido, hacemos dos cosas: adoptamos y adaptamos la cultura y tradición culinaria del lugar que nos acoge, y nos aferramos a la tradición culinaria del lugar que hemos dejado atrás. Son objetos de apego comestibles, y nada nos devolverá de un modo tan vivo a ese abrazo de la infancia como preparar esa sopa, esas lentejas o esos macarrones».
Los platos deliciosos de Ottolenghi, siempre basados en verdura, ligereza y color, estuvieron a punto de no existir. Estudió Literatura Comparada en Tel Aviv, y a continuación empezó a trabajar en un periódico en Ámsterdam. Poco después tuvo la idea de mudarse a Londres, y allí estudió cocina francesa en Le Cordon Bleu. Ya graduado, entró a trabajar en varios prestigiosos restaurantes londinenses, hasta que en 1999 conoció al profesional que le animó a dar forma a un estilo propio, Sami Tamimi. La larga amistad de ambos cocineros es especialmente inspiradora en estos momentos; Sami es palestino, y Yotam israelí.
“Detrás de un plato reconfortante suele haber un vínculo único“
«Para que un plato resulte reconfortante tiene tanto que ver con cómo, dónde y con quién lo comemos como con los alimentos en sí», explica el chef. «Detrás de un plato reconfortante suele haber una relación, un vínculo único», añade. Este otoño es una estación perfecta para abrir Compartir por cualquier página, e improvisar una comida con amigos. Ottolenghi, a quien también puede verse en programas de televisión, ha publicado con gran éxito de ventas Exuberancia, Cocina Simple, Sabores o Dulce, todos ellos presentados en España por la editorial Salamandra.
