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Los 6 errores más comunes de las dietas

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Descubre el error de las dietas

Se acercan las navidades y el descontrol se adueña de nuestro día a día. El ajetreo de las fiestas nos acelera el reloj y vamos con cierta prisa a todas partes, pero también nos hace olvidar los buenos hábitos. Son momentos para disfrutar con los amigos y la familia, pero no debemos olvidarnos de cuidar nuestra salud, que luego llegan las prisas con dietas que supuestamente nos darán un resultado milagroso. Esas dietas no siempre nos dan el resultado que esperábamos, la pregunta es por qué. ¿Por qué nuestras dietas no nos hacen conseguir lo que tanto deseábamos? ¡Aquí te contamos los 6 errores más comunes!

1. El tamaño del plato y el contenido del plato

Las raciones han empezado a aumentar, incluso en los restaurantes, pero nuestro organismo no necesita comer en grandes cantidades. Lo más recomendable es utilizar un plato de tamaño mediano, descartamos el grande porque tomaríamos en exceso, y el pequeño porque nos quedaríamos con hambre, querríamos repetir y al final volveríamos a caer en la abundancia.

2. El contenido del plato

El mejor alimento para nuestra dieta es la legumbre, porque tiene una combinación perfecta de hidrato de carbono, proteína, mucha cantidad de fibra muy buena para la microbiota, y también de minerales. Además, es barata, es muy fácil de cocina, es muy versátil y no nos importa si es de bote o seca, porque en ambos casos está deliciosa.

También le da mucha importancia a la patata, un alimento que cocinado de la forma adecuada, puede ser una gran opción para nuestras comidas. Es muy saciante, tiene un alto contenido en agua y una digestión lenta por el almidón.

Beneficios de la legumbre

3. No comer entre horas

Lo mejor es no comer entre horas, así llegaremos con hambre a la comida. Si saltándonos ese momento de aperitivo, llegamos a la comida con ganas de devorar, tampoco es lo más adecuado. En esos casos, Pablo Zumaquero, el experto en nutrición que nos aconseja, nos recomienda tomar alguno saludable como las aceitunas, preferiblemente con hueso porque tardaremos más en comerlas, pepinillos o pipas, que también nos tendrán entretenidos más tiempo.

4. Sin postres ni antojos

El postre no es para nada necesario. No hay que tomarlo sí o sí cada día, es una parte de la comida pensada para los momentos en los que acabamos de comer y sentimos que nos hemos quedado con un poco de hambre. En ese caso, sería recomendable tomar una pieza de fruta, pero nunca por costumbre una tarta o similares. Y por supuesto, sucede lo mismo con el capricho que a veces nos tomamos en la sobremesa con el café. Hay que olvidarse de la bollería en este momento, el típico croissant o las galletas no están invitados a esta fiesta cafetera.

5. Usar la comida para calmar la ansiedad

Otro de los problemas más comunes, sin duda, es acudir a la comida para calmar nuestro estrés o ansiedad. Cuando estamos bajo presión y sufrimos ese estrés, tendemos a consumir productos que nos hagan sentir bien por un ratito. Y es verdad que nos calma por un momento, pero a largo plazo no es una solución, el estrés seguirá estando y encima estaremos alimentando mal a nuestro cuerpo y produciremos el efecto contrario del que deseamos con una dieta.

6. Olvidarnos del deporte

Una alternativa más favorable a la bollería es hacer deporte. Cuando sufrimos de ansiedad, debemos movernos, desgastar el cuerpo, echar esos nervios fuera del cuerpo, y qué mejor manera que hacer algo de ejercicio, salir a andar, a correr, bailar, nada… cualquier deporte es buena idea. Nos ayudará a evitar comer sin necesidad y activará nuestro cuerpo favoreciendo la pérdida de peso.

Con estos consejos todo será más fácil. Tan solo hay que llevarlos a práctica y notaremos los beneficios de una dieta en la que nos cuidamos más y mejor y no nos castigamos por el exceso de peso.