Spainsat NG II, uno de los satélites más avanzados del mundo: así se ha vivido el lanzamiento desde Cabo Cañaveral
- El satélite español Spainsat NG II, uno de los más avanzados del mundo, despega con éxito desde Cabo Cañaveral
- Un equipo de RTVE es testigo de un lanzamiento que pasa a la historia de la carrera espacial española
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Un satélite, una cuenta atrás y un lanzamiento que pasará a la historia de la carrera espacial española. RTVE ha podido ser testigo de la puesta en órbita del SpainSAT NG II, un satélite militar elaborado por la empresa española Hisdesat en colaboración con el Ministerio de Defensa. La compañía norteamericana Space X, del magnate Elon Musk, fue la encargada de lanzarlo a bordo de un cohete Falcon 9 a las 3:30 minutos de la madrugada del 24 de octubre de 2025.
Para llegar a ese momento, la delegación española desplazada volamos desde la base aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid, a bordo de un avión del Ejército del Aire y del Espacio. Unas diez horas de vuelo entre conversaciones astronómicas y lecciones magistrales sobre tecnología espacial y comunicaciones de las que impregnarse era casi una obligación. El Aeropuerto Internacional de Orlando fue nuestro destino. Desde ahí, hasta Cabo Cañaveral.
El equipo de RTVE, en Cabo Cañaveral RTVE
Allí todo es “espacial”, nos dimos cuenta en cuanto llegamos al hotel. Constelaciones en las paredes, astronautas en la recepción y, por supuesto, una tienda donde todo tiene que ver con el espacio, desde camisetas hasta gorras y otros complementos. "I need my space" era uno de los lemas más recurrentes.
Muchos quieren vivir en primera persona el lanzamiento
El día del lanzamiento se notaba la tensión en el ambiente. Y no es cualquier ambiente, hablamos de Cabo Cañaveral, en el estado norteamericano de Florida. Se trata del principal punto de lanzamientos de la NASA. La historia impregna este lugar, al que acuden miles de curiosos cada vez que se programa el inicio de una misión. Y es lo que hemos visto la delegación española desplazada hasta aquí. A medida que se acercaba la hora, también lo hacían los amantes de la carrera espacial, que quieren vivir en primera persona este tipo de acontecimientos.
Pero la sorpresa llegó a mediodía. Una llamada de teléfono y unos segundos de silencio. Enseguida, los responsables de la empresa Hisdesat nos lo comunicaban: el lanzamiento se aplazaba 24 horas. Un fallo técnico en el cohete Falcon 9 era el motivo. Se había dañado el cableado del sistema de terminación de vuelo, un mecanismo de seguridad con el que cuentan estos aparatos. Empezó un trabajo de más de 10 horas para cambiar ese cableado. Son situaciones que pueden ocurrir, nos contaban los expertos.
Al día siguiente, todo estaba ya en orden. El satélite iba a despegar y la emoción volvía a colocarse en órbita. Nos acercábamos a la hora del lanzamiento y, en la mente de muchos, algunas de las misiones que han partido desde aquí y que están en el imaginario colectivo de varias generaciones. Es inevitable no acordarse del Apolo XI, que consiguió llevar a los primeros seres humanos a la luna en 1969. O de la tragedia del transbordador Challenger en 1986, que explotó a los pocos segundos del despegue matando a su tripulación. Son las luces y las sombras de la carrera espacial.
SpainSAT NG II, el hermano gemelo de satélite
Desde varios kilómetros, ahora sí, ya se podía avistar el cohete de Musk con el satélite español en su extremo. SpainSAT NG II es el nombre de esta proeza de la tecnología espacial. Lleva el apellido "dos" porque es el hermano gemelo del satélite que se lanzó a principios de año también desde Cabo Cañaveral. Y como su hermano, el SpainSAT NG II mide 7 metros de alto y 2,5 de ancho. Cuando despliega todos sus paneles, alcanza una envergadura de 40 metros. Pesa más de 6 toneladas, por lo que los expertos hablan de “un satélite de los grandes”. Los dos hermanos forman parte del programa español de comunicaciones seguras del Ministerio de Defensa, con una inversión de 2.000 millones de euros fruto de la colaboración público-privada con, entre otros, la empresa Hisdesat.
Su función es proporcionar comunicaciones seguras a las Fuerzas Armadas en cualquier entorno de operación, aéreo, marítimo y terrestre. Se encargan de garantizar, por ejemplo, que el mando en operaciones especiales llegue a los militares que están en zonas de conflicto evitando amenazas de otros países, interferencias o suplantaciones de identidad. Están reforzados contra la radiación y pueden seguir funcionando incluso ante un hipotético ataque nuclear. Está previsto que tengan una vida útil de más de 15 años y que cubran dos terceras partes de la superficie del planeta. Además de prestar servicio al ejército español, también hacen lo propio con nuestros países aliados, tanto en el entorno europeo como en el de la OTAN.
"Three, two, one… ignition"
Three, two, one… ignition. Es, quizás, el momento más emocionante del lanzamiento y llegó con una puntualidad absoluta. El pulso se acelera y las sensaciones recorren el cuerpo de cuantos se acercan. Los motores alcanzan la máxima potencia y empiezan a quemar las más de 500 toneladas de combustible necesarias. Un intenso resplandor convierte la noche en día y el humo lo inunda todo. Al mismo tiempo, un ruido ensordecedor impide escuchar las palabras de asombro de los espectadores. Vibra el suelo, el aire y hasta el propio cuerpo. Es una sensación difícil de describir con palabras. Y todo ocurre a velocidad de la luz. A los 2 minutos y 49 segundos, el satélite pierde una primera parte de la lanzadera. A los 3 minutos y 36 segundos, se desprende la cofia, una especie de caparazón protector. Y, por fin, a los 34 minutos y 7 segundos, a unos seis mil kilómetros de altura, cae la segunda parte del cohete y el SpainSAT NG II empieza su viaje en solitario. Es su nacimiento. Por delante, unos cinco meses de travesía hasta que empiece a operar como hace su hermano gemelo desde el mes de agosto.
Al margen de la espectacularidad del momento, su importancia. Estos dos satélites de comunicación son los más avanzados de Europa. Un enorme paso tecnológico en materia de investigación e innovación. Permitirán a la industria española liderar proyectos europeos en seguridad, defensa o control de riesgos. La puesta en órbita tanto de este satélite como de su hermano, los dos este año 2025, supone el hito espacial español más importante hasta la fecha.
Para el equipo de RTVE esta ha sido una experiencia de las que se quedan, de las que contamos cuando crecemos. Juan Barroso, José Muñoz y el que escribe, hemos sido testigos de un momento histórico y lo hemos hecho cámara y micro en mano. El servicio público también llega al espacio.
