Garzón celebra el último juicio de la Gürtel: "La Justicia ha llegado hasta el final a pesar las dificultades"
- Defiende la labor de los magistrados ante los casos de corrupción: "Somos jueces, somos servidores públicos"
- Asegura que "los efectos y consecuencias de la Gürtel siguen ocurriendo en este momento"
24 horas
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El exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha celebrado que, tras más de 16 años de investigaciones y juicios, la macrocausa de la Gürtel vaya a llegar ya a su fin con "la enseñanza de que el que la hace, la paga". Sin embargo, ha recordado las dificultades a las que se enfrentaron los instructores durante el procedimiento y la necesidad de proteger a los denunciantes.
"Hay más flecos de este tema, pero me quedaría con que la Justicia ha llegado hasta el final a pesar de las dificultades que hubo desde el primer momento para la investigación, desde el PP, desde todas las instancias. Y que tuvo consecuencias graves para el primero de los instructores, que fui yo", ha declarado en una entrevista en 24 Horas de RNE.
En este punto, ha señalado que aún queda pendiente la pieza Kitchen y ha considerado que "los efectos y consecuencias de la Gürtel siguen ocurriendo en este momento". Así, ha subrayado el PP "sigue aprovechándose de los beneficios que produjo" la trama al utilizar la sede en Génova 13, que "fue financiada con fondos B". "Los tres tesoreros del PP fueron condenados, han sido investigados y no ha cambiado el esquema delictivo de ese partido", ha añadido.
"Somos jueces, somos servidores públicos"
Fue el juez Garzón quien ordenó en febrero de 2009 las primeras detenciones en una operación contra la corrupción que había anidado en Madrid y Valencia. Activó la Operación Gürtel porque el líder de la trama, Francisco Correa, "tenía pensado marcharse fuera de España a Panamá", ha rememorado, al tiempo que ha subrayado que era consciente de la reacción que se iba a producir en cadena. "No soy adivino, soy observador y conozco mi profesión y dónde estaba, dónde me metía. Pero hay que hacerlo, es la obligación", ha defendido.
Años más tarde, fue inhabilitado por prevaricación por autorizar escuchas en prisión entre detenidos y abogados. Una sentencia que el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU) consideró "arbitraria" y por la que pidió una "reparación efectiva" para Garzón al considerar que se vulneró su derecho a la presunción de inocencia y a la revisión de la condena.
Respecto a la indemnización y del borrado de antecedentes penales que estableció dicho comité, el exmagistrado ha reclamado que el Poder Judicial lo aplique. "Parece que en España vulnerar los derechos humanos no tiene ningún precio y deciden no cumplir. Diséñenlo, cumplan, el dictamen del comité, es vinculante para España".
Pese a todo, ha dicho sentirse "reparado" porque a pesar "de los ataques de los que fui objeto" y los cambios de jueces –Garzón, Pablo Ruz o Jorge de la Mata–, la causa siguió adelante de "forma sólida". "Somos jueces, somos servidores públicos y vamos a seguir así. Ellos en su ámbito y yo en el mío. O donde me dejen", ha dicho.
Por otro lado, Garzón ha pedido reforzar la protección de quienes se atreven a denunciar. "Me apena que ha habido personas dentro de esta investigación que han cooperado y no han sido suficientemente protegidos. No es deducir penas, sino que a los alertadores que no son de la élite se les abandona. Eso es mensaje muy peligroso", ha afirmado. Por ello, ha pedido a las instituciones y al Poder Ejecutivo "que ponga pie en pared" y desarrollen los mecanismos que ya existen. "Hay medidas, pero no voluntad".
