Identifican a los 16 fallecidos del accidente del funicular en Lisboa, que son de ocho nacionalidades
- Entre ellos hay cinco portugueses, tres británicos, dos canadienses y dos surcoreanos
- El funicular de Gloria ha sido retirado completamente del lugar del accidente
Los 16 fallecidos en el accidente del miércoles en el funicular del Ascensor de la Gloria en Lisboa han sido ya identificados por las autoridades de Portugal y son de ocho nacionalidades distintas, tal y como ha informado este viernes la Policía Judicial portuguesa. Se trata de cinco portugueses, tres británicos, dos canadienses, dos surcoreanos, un francés, un estadounidense, un suizo y un ucraniano.
A última hora del jueves, las autoridades anunciaron que habían terminado las autopsias de los 16 fallecidos en el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses y que intentarían culminar su identificación a lo largo de la noche. La policía ha explicado que un ciudadano alemán que durante el jueves fue dado por muerto realmente no lo está, ya que ha sido localizado en el Hospital de São José de la capital, donde está ingresado. Su esposa está hospitalizada en estado grave y su hijo de 3 años ha sido dado de alta.
De las 23 personas que resultaron heridas 10 se encuentran en estado grave. Entre los heridos había dos españoles que fueron dados de alta la noche del miércoles, tal y como informó el Ministerio de Exteriores de España.
El funicular, conocido como Ascensor de Gloria (Elevador da Glória) descarriló sobre las 18.00 hora local (17.00 hora GMT) del miércoles por motivos que todavía se están investigando. Es probable que este viernes se conozcan los primeros datos confirmados de lo que pudo ocurrir. La hipótesis principal, hasta ahora, era la de la rotura del cable del funicular, pero medios locales apuntan a la posibilidad de que se hubiera desenganchado del tranvía.
Retiran los restos del funicular
En las últimas horas, el funicular de Gloria ha sido retirado completamente del lugar del accidente. Solo quedan las vías, ya que se ha trasladado tanto el vagón que descarriló (que se situaba en la parte alta), como la cabina que estaba en la parte posterior.
Pese a que ya no quedan restos, todavía está precintado el acceso a la Calçada da Glória, la cuesta por la que subía y bajaba ese medio de transporte. La Policía ya ha terminado de recabar pruebas sobre el terreno y a primera hora de la mañana tan solo se veía en esa calle a tres operarios del Ayuntamiento.
Fuera del cordón había periodistas de distintas nacionalidades y, en un lado, están apilados ramos de flores y mensajes dejados por los ciudadanos y por las autoridades. El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, así como el primer ministro, Luís Montenegro, y el alcalde de Lisboa, Carlos Moedas, depositaron ofrendas la noche del jueves.