El Congreso establece las conductas a sancionar y los criterios de exclusión para los periodistas parlamentarios
- Prohíbe actitudes de acoso de los profesionales acreditados y delimita los espacios a los que pueden acceder
- No acreditará a algunas webs ni a medios que estén vinculados a partidos políticos
La Mesa del Congreso ha fijado este martes las normas básicas de convivencia que deberán seguir los periodistas que cubren la información de la Cámara Baja, las conductas a sancionar y los criterios de exclusión de los profesionales de la comunicación, con el fin de evitar las actitudes de acoso que han denunciado algunos diputados y profesionales de la comunicación cometidas por agitadores ultra.
El texto, acordado con la Asociación de Periodistas Parlamentarios y la Federación de Asociaciones de la Prensa de España, responde a la reforma del Reglamento del Congreso que se aprobó el pasado mes de julio con el voto a favor de los partidos del Gobierno y de los socios de investidura y que contó con la oposición de PP y Vox.
Entre las principales novedades, el Congreso creará un Consejo Consultivo compuesto por los grupos políticos, los departamentos funcionariales y las asociaciones de periodistas en línea con el espíritu de colaboración establecido previamente a la reforma del Reglamento con el objetivo de facilitar el día a día de la profesión periodística.
Se excluye a algunas webs y a los colaboradores de partidos
El texto detalla las dependencias parlamentarias por las que pueden circular los informadores y aquellas que requieren algún tipo de autorización. Veta, por ejemplo, el libre acceso a los garajes o a los despachos de los diputados.
El acuerdo de la Mesa regula también los criterios para rechazar acreditaciones de prensa, una tarea que corresponde a la Dirección de Comunicación del Congreso. Entre otras cuestiones, los medios acreditados deberán tener una plantilla de más de diez trabajadores dados de alta en la Seguridad Social y estar al corriente de pago de sus cuotas correspondientes.
Por contra, no se acreditará algunas páginas web, como aquellas agregadoras de contenidos de otros sitios web o plataformas digitales. Tampoco los blogs y canales de YouTube, las emisoras de radio o cadenas de televisión de difusión digital, sin ninguna concesión administrativa, y los departamentos de comunicación de 'lobbies'. Tampoco se acreditará a "quien trabaje o colabore en los equipos de comunicación" de partidos políticos o fundaciones políticas.
Prohíbe el acoso y fija criterios para grabar
Por otra parte, las entrevistas o peticiones de declaraciones solo se producirán con el permiso de la persona entrevistada, y los periodistas deberán respetar dicha decisión, sin que puedan producirse seguimientos una vez que el interpelado lo haya decidido. Precisamente, algunas de las actitudes denunciadas se refieren al "acoso" que han sufrido algunos diputados por la insistencia de periodistas "ultra" a que respondieran a ciertas preguntas, tanto en los pasillos e inmediaciones del Congreso como en las salas de prensa, donde han llegado a interrumpir las ruedas de prensa y perjudicado el trabajo de otros profesionales de la comunicación.
Por otra parte, el texto prohíbe a los periodistas de prensa escrita grabar imágenes y vídeos en la Cámara, actividad permitida exclusivamente a los informadores gráficos, aunque sí podrán rabar audios.
Por otra parte, se prohíbe cualquier tipo de captación de imagen o sonido en el recinto parlamentario que vulnere la intimidad personal o el secreto de las comunicaciones. Así, los reporteros gráficos y operadores de televisión se abstendrán de captar imágenes de los dispositivos electrónicos personales de los miembros de la Cámara y del Gobierno o del contenido de cualquier documento que los mismos empleen en el curso de las sesiones parlamentarias.
Sanciones
Cuando se detecte una actuación sancionable, se podrá denunciar al periodista acreditado ante el departamento de Comunicación y la Mesa del Congreso enviará el caso al Consejo Consultivo de Comunicación Parlamentaria (CCCP), del que formarán parte dos miembros de la Mesa (un representante de la Presidencia y otro de la Vicepresidenta Segunda que suele ocupar la oposición), periodistas propuestos por la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) y un miembro de cada grupo parlamentario.
Los representantes de los partidos, por mayoría ponderada (según su peso en el hemiciclo), serán los que decidan si la denuncia debe conllevar o no una propuesta de sanción, si bien la resolución corresponde a la Mesa del Congreso, ante la que cabe recurso.
La actividad de los representantes de los medios de comunicación en el Congreso ha estado hasta ahora regulada por criterios no escritos, admitidos y conocidos por todos, que establecían los requisitos y espacios en los que podían desarrollar su labor informativa. Estos criterios no han sido rígidos y se han ido adaptando conforme ha evolucionado el panorama mediático y las nuevas formas de ejercicio de la profesión periodística.
A raíz de esta normativa, todos los representantes de los medios deberán firmar una declaración responsable en la que expresen el conocimiento de las normas de actuación periodística.